El Gregorio Marañón desmiente la muerte de dos pacientes por falta de atención
El gerente del hospital Gregorio Marañón, Francisco Abad, desmintió ayer los hechos reflejados en el parte de urgencias por el doctor Antonio Barba, responsable del centro durante la noche del pasado lunes. En este escrito se afirma que dos pacientes murieron mientras aguardaban para ser atendidos en el servicio de urgencias. Abad replicó que uno de los fallecidos ingresó cadáver en el Gregorio Marañón, en tanto que el otro recibió una correcta asistencia médica, según la documentación que obra en su poder, y que ha sido remitida al juez de guardia y al Defensor del Pueblo.El gerente del Grego...
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El gerente del hospital Gregorio Marañón, Francisco Abad, desmintió ayer los hechos reflejados en el parte de urgencias por el doctor Antonio Barba, responsable del centro durante la noche del pasado lunes. En este escrito se afirma que dos pacientes murieron mientras aguardaban para ser atendidos en el servicio de urgencias. Abad replicó que uno de los fallecidos ingresó cadáver en el Gregorio Marañón, en tanto que el otro recibió una correcta asistencia médica, según la documentación que obra en su poder, y que ha sido remitida al juez de guardia y al Defensor del Pueblo.El gerente del Gregorio Marañón aseguró que las puntualizaciones del doctor Antonio Barba "no se corresponden con la realidad de los hechos". El parte de incidencias, en el que se reflejaban las circunstancias en las que fallecieron los dos pacientes, fue reproducido en su edición de ayer por el diario madrileño El Mundo.
El doctor Barba, que actuaba como jefe del hospital en la noche del día 22, explica en el documento remitido a la dirección del Gregorio Marañón las razones por las que tuvo que cerrar durante dos horas el servicio de urgencias ante la avalancha de ingresos en el centro.
Barba señala que un paciente, Arturo Blázquez Izquierdo, de 48 años, fue hallado muerto a la una de la madrugada en una camilla. "Nadie le ha visto, nadie da explicaciones", señala el parte de incidencias. En el mismo escrito, denuncia que Ignacio Tejedor, de 47 años, falleció durante esa misma noche "sin ser visto ni atendido" a pesar de haber ingresado a la una de la tarde.
El gerente del Gregorio Marañón dijo que "no era verdad' que Arturo Blázquez muriera en una camilla, ya que ingresó cadáver en el centro, según un certificado remitido al juez de guardia por el doctor Barba.
El director médico del hospital, Pedro García Barreno, precisó, por su parte, que constan en los archivos del hospital los cuidados médicos que se dispensaron a Ignacio Tejedor afectado por una hemorragia interna, y que sufrió una parada cardiaca que le produjo la muerte a las once de la noche.
La dirección del centro informó ayer que los hechos han sido puestos en conocimiento del Juzgado de Instrucción número 32, de guardia en la noche del lunes, y del Defensor del Pueblo. Los responsables del Gregorio Marañón anunciaron que el consejero de Salud, Pedro Sabando, ha solicitado su comparecencia urgente ante la Asamblea de Madrid.
Este periódico intentó ayer, sin éxito, ponerse en contacto con el doctor Barba.
Mientras, los facultativos de medicina interna del servicio de urgencias del hospital Doce de Octubre se reunieron en asamblea el miércoles para debatir la situación de deterioro" que padece la sección. Según los médicos residentes, que han trasladado a la dirección su descontento, en los últimos siete años se ha doblado la demanda mientras que los medios técnicos y humanos no han variado. Según indican, incluso se ha reducido plantilla.