Comunistas de los cinco continentes

Una representación de comunistas de los cinco continentes montó guardia de honor a las diez de la mañana de ayer en la capilla ardiente de Dolores Ibárruri, como símbolo del homenaje internacional que el comunismo rinde a la líder española. Así se inició el desfile de un centenar de delegaciones extranjeras, que de 10 a 12 de la mañana, se turnaron ante los restos de la difunta.Tomás Borge, ministro del Interior nicaragüense; Andrei Girenko, secretario del comité central del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS); Ahmed Bujari, dirigente del Frente Polisario; Giancarlo Pajetta, miembro...

Una representación de comunistas de los cinco continentes montó guardia de honor a las diez de la mañana de ayer en la capilla ardiente de Dolores Ibárruri, como símbolo del homenaje internacional que el comunismo rinde a la líder española. Así se inició el desfile de un centenar de delegaciones extranjeras, que de 10 a 12 de la mañana, se turnaron ante los restos de la difunta.Tomás Borge, ministro del Interior nicaragüense; Andrei Girenko, secretario del comité central del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS); Ahmed Bujari, dirigente del Frente Polisario; Giancarlo Pajetta, miembro del comité central del Partido Comunista Italiano (PCI), y Abu Khaldum, de la OLP, representaron, a los comunistas de América, Europa del Este y del Oeste, África y Oriente Próximo.

"Antes que nada quiero expresar mi condolencia, mi solidaridad y el asombro que me provoca la inmortalidad de Pasionaria", declaró Borge cuando todos los periodistas se abalanzaron sobre él para interrogarle acerca de la situación en Centroamérica, agravada por la ruptura del alto el fuego en su país y la ofensiva guerrillera en El Salvador.

No fue Borge, sin embargo, el único centro de atención del día. La jornada sirvió para reunir en una misma sala a cornunistas de todas las tendencias, en un momento en que se cuestionan los principios de esta ideología a raíz de los vertiginosos cambios en los países del Este. Representantes rumanos, los más resistentes a los cambios iniciados por Gorbachov; italianos, que están cuestionando su propio nombre comunista, o el embajador chino, representante del Gobierno que aplastó violentamente las revueltas de Tiananmen, olvidaron sus diferencias para ensalzar juntos a Dolores Ibárruri.

Georges Marchais, secretario general del Partido Comunista Francés, hizo una apasionada alabanza de Pasionaria, "que va a llevarse consigo a la tumba una etapa gloriosa del rnovimiento obrero español e internacional". El líder francés, en referencia a los acontecnmientos que viven los países del Este, declaró: "El socialismo y el comunismo no desaparecerán. La crisis del capitalismo es una crisis de sistema. La del socialismo, no. Se trata de un problema de modernización, pero tengo la seguridad de que en el socialismo está el futuro de la humanidad". Con el mismo optimismo se expresaron checoslovacos y soviéticos.

El secretario general del PCE, Julio Anguita, que anoche tenía previsto saludar a todas las delegaciones extranjeras, se reunió por la mañana en su despacho durante 15 minutos con Marchais y durante otro cuarto de hora con Borge.