Los temores de una devaluación

Los datos de comerc¡o exterior correspondientes al rnes de octubre, en especial las exportaciones, muestran una desviación tan fuerte sobre lo ocurrido el mes anterior que cabe explicar una parte del crecimiento de las ventas al exterior por ausencia. de contabilización de operaciones realizadas entonces.En momentos de tensión sobre los tipos de cambio de una moneda las cifras de comercio exterior suelen reflejar retrasos, o adelantos en el cobro y en el pago de dichas transacciones a la espera de una posible modificación de las paridades de las monedas.

Algunos expertos consideran que ...

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Los datos de comerc¡o exterior correspondientes al rnes de octubre, en especial las exportaciones, muestran una desviación tan fuerte sobre lo ocurrido el mes anterior que cabe explicar una parte del crecimiento de las ventas al exterior por ausencia. de contabilización de operaciones realizadas entonces.En momentos de tensión sobre los tipos de cambio de una moneda las cifras de comercio exterior suelen reflejar retrasos, o adelantos en el cobro y en el pago de dichas transacciones a la espera de una posible modificación de las paridades de las monedas.

Algunos expertos consideran que en septiembre, en medio de turbulencias sobre la peseta, algunos exportadores optaron por retrasar el cobro de las deudas contraidas por los clientes del exterior a la espera de que se produjera una posible depreciación de la peseta.

De esta forma, al transformar las divisas en pesetas habrían obtenido un beneficio suplementario. Lo contrario pudo ocurrir, aunque en menor medida, con los importadores españoles que pudieron preferir adelantar el pago de productos por recibir.

Pasadas las especulaciones sobre la peseta, que apenas si se ha movido respecto a la senda normal en relación a las monedas de los países que forman parte del Sistema Monetario Europeo, las aguas han vuelto a su cauce en octubre y de ahí podría venir una parte importante del crecimiento monetario de las ventas al exterior.

Si se hace la media de lo ocurrido en los dos últimos meses resulta que el crecimiento de las exportaciones se situaría, en tasa mensual en tomo al 18%, cifra elevada en todo caso, pero bastante más acorde con lo que puede considerse normal y que echaría por tierra los temores a una pérdida de la competitividad de los productos españoles en el exterior expresados por el presidente de la patronal CEOE, José María Cuevas, que ha solicitado una devaluación de la peseta.

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