Solidaridad renuncia a "privilegios" del poder

Los senadores y diputados de Solidaridad han renunciado a los servicios a que tienen derecho por considerarlos "privilegios" en la sociedad polaca, según informó ayer la oficina de ese grupo parlamentario. Los 261 representantes del Comité Ciudadano de Solidaridad no utilizarán coches oficiales y tampoco disfrutarán de atención sanitaria especial.La cancillería del Congreso informó de que hay un transporte común para los diputados y senadores, una pequeña flota de automóviles de fabricación nacional, con chófer, para cubrir las necesidades oficiales.

Sin embargo, la práctica habitual ha...

Los senadores y diputados de Solidaridad han renunciado a los servicios a que tienen derecho por considerarlos "privilegios" en la sociedad polaca, según informó ayer la oficina de ese grupo parlamentario. Los 261 representantes del Comité Ciudadano de Solidaridad no utilizarán coches oficiales y tampoco disfrutarán de atención sanitaria especial.La cancillería del Congreso informó de que hay un transporte común para los diputados y senadores, una pequeña flota de automóviles de fabricación nacional, con chófer, para cubrir las necesidades oficiales.

Sin embargo, la práctica habitual hasta ahora era distinta, y es de dominio público que hasta directores de pequeñas industrias estatales, funcionarios de ministerios y representantes del partido comunista gozaban de una especie de derecho consuetudinario del que hacían ostentación. En cuanto a los servicios sanitarios, los parlamentarios tienen derecho a una clínica para pacientes de elite en Varsovia, reservada para las autoridades.

"Ahora debemos decir no"

Por su parte, Adam Michnik, asesor de Solidaridad y miembro del gabinete en la sombra de Lech Walesa, declaró a Andrea Tarquini, de La Repubblica, al explicar la negativa del grupo a integrar el Gobierno de Czeslaw Kiszczak: "Ahora debemos decir no al general Kiszczak, no entraremos en su Gobierno, y el general lo sabe muy bien. ¿El futuro? El juego está abierto. Se verá. El hecho más interesante el la voluntad de compromiso que registro en todas las partes".

Michnik señaló que no se trata de una oportunidad perdida "porque [ ... ] en medio de la actual crisis económica, después de los aumentos de precios, la gente no recibiría como una señal de esperanza nuestra entrada en una coalición con los que han gobernado 40 años".

El asesor de Solidaridad señala que "para comenzar a resolver la crisis es necesaria una lucha contra el sistema de la nomenklatura, contra el pletórico aparato que controla la economía. No entramos en el Gobierno porque creemos que Kiszczak, por el momento, no puede participar en esta lucha, por cuanto la nomenklatura sigue siendo la base social del futuro Gobierno". Michnik agregó que permanecía, en cambio, "válida" la propuesta de Solidaridad de "cohabitación al estilo francés: a los comunistas, la presidencia de la República; a nosotros, la formación de la mayoría de Gobierno".

Al ser preguntado si Walesa se refería a la URSS cuando señaló que existía en el Pacto de Varsovia hostilidad contra un eventual Gobierno de Solidaridad, Michnik afirmó: "En absoluto. He estado en la URSS y he tenido impresiones de gran interés. [ ... ]La doctrina Breznev ha muerto".