El soldado acusado de matar a una mujer en Madrid tenía órdenes de no montar su arma

El coronel José Manuel Estévez, responsable del cuartel de Infantería de Marina de Madrid, aseguró ayer en el juicio que se sigue contra uno de los soldados de esta unidad por la muerte de una mujer que paseaba por la calle de Arturo Soria el 16 de abril de 1987, que ningún centinela debía llevar el arma montada durante la guardia. El coronel añadió que "tras oir un ruido", ordenó averiguar lo ocurrido y "el oficial de guardia dijo que no había pasado nada".El coronel, citado como testigo en la segunda sesión del juicio contra el soldado Francisco Javier Suárez, manifestó que existía una orden...

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El coronel José Manuel Estévez, responsable del cuartel de Infantería de Marina de Madrid, aseguró ayer en el juicio que se sigue contra uno de los soldados de esta unidad por la muerte de una mujer que paseaba por la calle de Arturo Soria el 16 de abril de 1987, que ningún centinela debía llevar el arma montada durante la guardia. El coronel añadió que "tras oir un ruido", ordenó averiguar lo ocurrido y "el oficial de guardia dijo que no había pasado nada".El coronel, citado como testigo en la segunda sesión del juicio contra el soldado Francisco Javier Suárez, manifestó que existía una orden tajante de que los centinelas debían llevar el cargador de cinco balas en el bolsillo. Según esta versión, el procesado desatendió la orden, puesto que causó la muerte a María Gabarrón, al disparar un tiro cuando simulaba realizar prácticas de puntería desde una de las garitas.

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