Ceuta y Melilla, poca agua pero muchos comercios

Si de algo no carecen Ceuta y Melilla es de comercios. La actividad de este subsector es vital para la supervivencia de estos dos enclaves españoles en el norte de África. El agua ya es harina de otro costal. En Melilla hay muy poca y en Ceuta prácticamente no existe y ha de ser traída en barcos cisterna.Ambas ciudades viven del sector servicios, aunque a diferencia de Canarias, el turismo está infradesarrollado. El sector agrario no existe, el pesquero no explota todas sus potencialidades y el industrial, con poco peso relativo en el valor añadido bruto (VAB), está formado por pequeñas empres...

Si de algo no carecen Ceuta y Melilla es de comercios. La actividad de este subsector es vital para la supervivencia de estos dos enclaves españoles en el norte de África. El agua ya es harina de otro costal. En Melilla hay muy poca y en Ceuta prácticamente no existe y ha de ser traída en barcos cisterna.Ambas ciudades viven del sector servicios, aunque a diferencia de Canarias, el turismo está infradesarrollado. El sector agrario no existe, el pesquero no explota todas sus potencialidades y el industrial, con poco peso relativo en el valor añadido bruto (VAB), está formado por pequeñas empresas. En Ceuta sólo hay una sociedad con más de 50 trabajadores, aunque en Melilla destaca la actividad de los talleres de automóviles.

Ambas ciudades padecen graves problemas de vivienda. En Ceuta hay un déficit de 3.500 viviendas y en Melilla faltarán 7.000 en 1992, según las previsiones actuales. Las tasas de paro son muy elevadas, y su disminución presenta el problema añadido del bajo nivel formativo, que incluso no han llegado a tener jamás ninguna ocupación.

El PDR de Ceuta -con un presupuesto de algo más de 36.000 millones de pesetas- prevé la creación de cursos de formación ocupacional, profesional y empresarial, un mejor aprovechamiento de los recursos pesqueros y energéticos (solar y eólica), la creación de suelo industrial, el impulso del turismo, la edificación de viviendas y la mejora de los equipamientos sociales. El Plan General de Ordenación Urbana debe constituir un elemento básico para el desarrollo de la ciudad y la creación de suelo urbano y urbanizable, para coordinar las actuaciones propias del Ayuntamiento en temas básicos como saneamiento, luz, agua y viales.

El Plan de Desarrollo de Melilla tiene como objetivo la creación de empleo; el incremento y mejora de la producción; y la diversificación del aparato productivo mediante un mejor aprovechamiento de los recursos agrícolas y pesqueros, la creación de suelo industrial y la potenciación del sector turístico. Para ello, el PDR dispondrá de 39.300 millones de pesetas.