Cartas al director

De los póngidos

El comportamiento sexual del empresario juzgado recuerda el de los póngidos.Según la biología, en el suborden antropoides de los primates

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está la superfamilia hominotdeos, que consta de tres familias: póngidos, homínidos e hilobátidos. Estas tres familias tienen tres comportamientos sociales diferentes. Los monos póngidos son promiscuos, los hilobátidos forman familias nucleares y los homínidos parece que tienen un comportamiento biológico etológico intermedio entre los dos citados, pero que...

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El comportamiento sexual del empresario juzgado recuerda el de los póngidos.Según la biología, en el suborden antropoides de los primates

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está la superfamilia hominotdeos, que consta de tres familias: póngidos, homínidos e hilobátidos. Estas tres familias tienen tres comportamientos sociales diferentes. Los monos póngidos son promiscuos, los hilobátidos forman familias nucleares y los homínidos parece que tienen un comportamiento biológico etológico intermedio entre los dos citados, pero que se caracteriza por la confusión, ya que está enmascarado por una maraña de diversos tabúes. Como prueba de la dicha confusión notaremos que hay opiniones absolutamente opuestas sobre ello: la señora Van Lavick Goodall afirma que el comportamiento sexual en nuestra especie es igual al de los chimpancés; por contra, el antropólogo Marvin llarris, entre la gran cantidad de pueblos estudiados, no halla ni un solo caso de sociedad humana promiscua.

El tabú puede ser algo repulsivo, como, por ejemplo, la circuncisión femenina, pero también tiene la característica de su injusticia, ya que, en la práctica, los poderosos suelen saltárselo a la torera y se ríen de los demás, que somos esclavos de ancestrales y estúpidas prohibiciones.

En el caso que nos ocupa, el poderoso empresario prescindió del tabú para él, mientras sus empleados obedecían, contra natura, el modelo hilobático de comportamiento.-

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