Dimiten todos los dirigentes de la república yugoslava de Montenegro
La república yugoslava de Montenegro vivió ayer una de las jornadas más dramáticas de las últimas décadas. El pueblo derribó a todos sus dirigentes. Tras más de 30 horas de presión popular -manifestaciones continuas movilizaron 120.000 personas de toda la República de Montenegro- dimitieron el presidene del partido único y del Estado y los representantes montenegrinos ante la presidencia colectiva del país y la presidencia de la Liga Comunista. Las masas recibieron las noticias con ovaciones, tensiones populares y bailes folclóricos.Durante un día y una noche, ningún dirigente montenegrino se ...
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La república yugoslava de Montenegro vivió ayer una de las jornadas más dramáticas de las últimas décadas. El pueblo derribó a todos sus dirigentes. Tras más de 30 horas de presión popular -manifestaciones continuas movilizaron 120.000 personas de toda la República de Montenegro- dimitieron el presidene del partido único y del Estado y los representantes montenegrinos ante la presidencia colectiva del país y la presidencia de la Liga Comunista. Las masas recibieron las noticias con ovaciones, tensiones populares y bailes folclóricos.Durante un día y una noche, ningún dirigente montenegrino se atrevió a dirigirse a la más grande concentración popular en la historia socialista de Montenegro. Sólo a media mañana de ayer el vicepresidente de la asamblea regional anunció públicamente las dimisiones. Los dirigentes montenegrinos presentaron sus dimisiones sin observar los procedimientos legales, lo que significa el colapso de todas las instituciones. Apenas están por celebrarse las reuniones de urgencia del comité central regional y del Gobierno para discutir la situación crítica, sin precedentes en Yugoslavia, cuando en menos de 24 horas cayeron todas las estructuras del poder.
Los órganos federales han mantenido el silencio total sobre los últimos acontecimientos, lo que puede significar que entre los líderes máximos del país existe un desacuerdo en el análisis de la situación, que rebasó tal vez todos sus cálculos.