El BBV empieza a despedir trabajadores

El consabido excedente de personal que se produce por la fusión de los bancos de Bilbao y de Vizcaya ocasiona los primeros despidos de trabajadores.En primer lugar, la rescisión del contrato a los 1.500 eventuales que llevaban varios años prestando sus servicios al banco. Muchos de ellos habían recibido promesas, antes de la fusión, de que sus contratos serían renovados, y ahora quieren echarles a la calle.

Después, a los 15 días de celebrarse la fusión, me despiden a mí (representante sindical por el Colectivo Autónomo de Trabajadores del Banco de Bilbao); me acusan de trabajar, durant...

El consabido excedente de personal que se produce por la fusión de los bancos de Bilbao y de Vizcaya ocasiona los primeros despidos de trabajadores.En primer lugar, la rescisión del contrato a los 1.500 eventuales que llevaban varios años prestando sus servicios al banco. Muchos de ellos habían recibido promesas, antes de la fusión, de que sus contratos serían renovados, y ahora quieren echarles a la calle.

Después, a los 15 días de celebrarse la fusión, me despiden a mí (representante sindical por el Colectivo Autónomo de Trabajadores del Banco de Bilbao); me acusan de trabajar, durante cuatro días y a partir de las ocho de la tarde, en asuntos particulares estando de baja médica (baja médica en la que se me permitía salir de mi domicilio). Los hechos que se me imputan no se ajustan a la realidad, ya que el hecho de asistir a un lugar no significa que se esté trabajando.

Lo que resulta realmente asombroso son los métodos tan denigrantes utilizados por el banco: saltándose los derechos constitucionales que en teoría nos amparan, los directivos del BBV contratan a una empresa de detectives para que me vigilen -lo cual llevaban realizando durante algún tiempo, según he podido comprobar posteriormente- y espíen mi vida privada. Mucho me temo que esto no sea un hecho aislado, y sea una forma de tener controlados a aquellos que más les molestan, es decir, a los que trabajamos en contra del último convenio de banca y a los que denunciamos los abusos que constantemente comete la banca.

Así las cosas, me encuentro todos los días en la puerta del BBV, en Alcalá, 16, reclamando mi puesto de trabajo -que he perdido después de 19 años- y denunciando los métodos utilizados por el banco. Parece paradójico que una empresa que gana miles de millones con el trabajo de sus empleados y con el ahorro de sus clientes utilice esos beneficios en contratar a detectives que persigan a sus empleados, y no sólo no crean puestos de trabajo, sino que intentan que sus ganancias sean más abundantes despidiendo a los trabajadores que ya tienen.-