Las diferencias entre Irán e Irak amenazan con llevar al fracaso la reunión de la OPEP, que comienza hoy en Viena

El ministro iraquí del petróleo, Issam Abdul Rajim al Chalabi, reiteró ayer la exigencia de Bagdad para que se conceda a su país una igualdad de cuota de producción de petróleo con Irán, en una reunión de productores árabes de crudo en Viena, puntualizando el fracaso de cuatro días de negociaciones de los ministros de Indonesia, Nigeria y Venezuela, que intentaron mediar para un acuerdo entre las dos naciones que facilite un punto de partida para la reducción de la producción de petróleo. Si no hay acuerdo, los excedentes de producción pueden llevar a un crash de los precios.El único ac...

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El ministro iraquí del petróleo, Issam Abdul Rajim al Chalabi, reiteró ayer la exigencia de Bagdad para que se conceda a su país una igualdad de cuota de producción de petróleo con Irán, en una reunión de productores árabes de crudo en Viena, puntualizando el fracaso de cuatro días de negociaciones de los ministros de Indonesia, Nigeria y Venezuela, que intentaron mediar para un acuerdo entre las dos naciones que facilite un punto de partida para la reducción de la producción de petróleo. Si no hay acuerdo, los excedentes de producción pueden llevar a un crash de los precios.El único acuerdo en las reuniones celebradas este fin de semana ha sido la aprobación del presupuesto de la Organización de Países Árabes Exportadores de Petróleo (OPAEP), que fue fijado en 10.700 millones de dólares (más de 1,2 billones de pesetas). Pese a todo, el secretario general de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, el indonesio Subroto, se negó ayer a admitir la derrota tras los obstáculos en la negociación, pero admitió que su equipo de negociadores no estaría en condiciones de ofrecer una propuesta de acuerdo en la inauguración de la reunión de la OPEP hoy. Subroto dijo a los periodistas ayer que "debemos ser realistas, son necesarias diversas consultas con nuestros gobiernos" para avanzar.La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) iniciará hoy una reunión plenaria en Viena con el objetivo de alcanzar un acuerdo de producción que limite los excedentes del mercado pero carece para este fin de acuerdo entre Irán e Irak lo que pone en tela de juicio el buen fin del cónclave y amenaza con deprimir aún más los precios del barril de crudo."Es imposible pensar que se pueda alcanzar un acuerdo entre los 13 si no hay pacto entre las dos naciones beligerantes", declaró ayer un analista del sector. Actualmente el nivel de producción se estima en unos 23 millones diarios de barriles, lo que coloca a la oferta un 20% por encima de la demanda para la producción de la OPEP.El petróleo crudo Dubai, una mezcla clave de los productos de Medio Oriente de la OPEP se cotizó al cierre de esta semana por debajo de los 10 dólares, lo que representa unos ocho dólares por debajo del precio de referencia del grupo de naciones.

Diferencias

Los analistas internacionales por su parte coincidieron este fin de semana en señalar que la ausencia de una reducción de las cuotas, es decir el fracaso de la reunión de las 13 naciones miembro, podría ocasionar una baja sin precedentes del precio del crudo.

La imposibilidad de un acuerdo está signada por las diferencias entre Irán e Iraq sobre las cuotas respectivas de producción. Irán, tradicionalmente un gran productor tiene desde siempre asignada una cuota superior a la de Irak. Éste último incrementó, desde la provisoria paz con su archienemigo, los topes de producción, y fuentes del sector consideran que aspira a llegar a los cuatro millones de barriles diarios desde los 2,7 millones que produce en la actualidad.

Si la reunión llega al martes o miércoles sin posible acuerdo los efectos del mercado se harán sentir, esencialmente porque los operadores tomarán posiciones a la baja para los contratos futuros. Una mayor caída de los precios del petróleo favorecería el control inflacionario en los países de la OCDE, especialmente en los Estados Unidos, aunque afectaría a Gran Bretaña y golpearía aún más a la economía de Noruega, ambos fuertes productores del Mar del Norte.

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