Walesa se reúne por primera vez con la cúpula del sindicato oficial

Lech Walesa y otros líderes del sindicato ilegal Solidaridad mantuvieron ayer por primera vez contacto directo con dirigentes del sindicato oficial polaco OPZZ. El sindicato oficial es un declarado adversario del pluralismo sindical que reivindican Walesa, la iglesia y la oposición. Ambas partes acordaron celebrar a mediados del mes próximo una reunión, plena y formal en la que participarán otras fuerzas políticas y sociales para discutir el futuro del país.El encuentro de ayer, el segundo en dos días entre la oposición y miembros de la dirección del régimen polaco, abre una nueva fase en el d...

Lech Walesa y otros líderes del sindicato ilegal Solidaridad mantuvieron ayer por primera vez contacto directo con dirigentes del sindicato oficial polaco OPZZ. El sindicato oficial es un declarado adversario del pluralismo sindical que reivindican Walesa, la iglesia y la oposición. Ambas partes acordaron celebrar a mediados del mes próximo una reunión, plena y formal en la que participarán otras fuerzas políticas y sociales para discutir el futuro del país.El encuentro de ayer, el segundo en dos días entre la oposición y miembros de la dirección del régimen polaco, abre una nueva fase en el diálogo en busca de un consenso amplio sobre las vías de solución a la crisis política, económica y social. Uno de los mediadores que asistió a la reunión definió anoche "tenso, pero constructivo" el clima de la discusión. "Estoy contento, porque se han acercado las posiciones, pero mientras no se legalice a Solidaridad no habrá libertad", declaró, a su vez, Walesa.

A instancias y en presencia del ministro del Interior, Czeslaw Kiszczak, miembros de Solidaridad, de los comités de huelga formados en la reciente oleada de protestas y mediadores de la iglesia se reunieron en Varsovia con el vicepresidente del OPZZ, Romuald Sosnowski. El régimen y OPZZ rechazan la posibilidad de que dos sindicatos actúen en la misma empresa por considerarlo un riesgo de trasladar la lucha política a la misma y de dividir a la clase obrera.

Las dificultades para lograr un pluralismo sindical sin que se vuelvan a producir enfrentamientos internos y políticos en las empresas, como sucedió en 1981, es uno de los principales obstáculos. No obstante, Walesa ha coincidido con el miembro del buró político Jozef Czyrek en sugerir que el "modelo de la República Federal de Alemania" podría ser un modelo a considerar.

En la organización sindical alemana occidental existen diversos sindicatos que están representados en el comité de empresa proporcionalmente al apoyo con que cuenten en la plantilla. El interlocutor de la dirección es siempre: el comité de empresa, único representante de la plantilla como tal.