Dos policías de la lucha antiterrorista, asesinados en Vizcaya

Los policías Martín Martínez Velasco, de 33 años, casado y sin hijos, y Pedro Antonio Fonte Santo, de 28, soltero, fueron asesinados ayer, presumiblemente, por la organización terrorista ETA en un atentado perpetrado sobre las 17.30 en el bar Ozaeta, de Izurza, localidad vízcaína cercana a Durango. El inspector Martínez Velasco, que pertenecía, al igual que su compañero asesinado, a la Brigada de Información Antiterrorista de Bilbao, fue tiroteado cuando se encontraba hablando por teléfono en el bar, mientras que el agente fue sorprendido en un coche policial de camuflaje. Ambos policías se en...

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Los policías Martín Martínez Velasco, de 33 años, casado y sin hijos, y Pedro Antonio Fonte Santo, de 28, soltero, fueron asesinados ayer, presumiblemente, por la organización terrorista ETA en un atentado perpetrado sobre las 17.30 en el bar Ozaeta, de Izurza, localidad vízcaína cercana a Durango. El inspector Martínez Velasco, que pertenecía, al igual que su compañero asesinado, a la Brigada de Información Antiterrorista de Bilbao, fue tiroteado cuando se encontraba hablando por teléfono en el bar, mientras que el agente fue sorprendido en un coche policial de camuflaje. Ambos policías se encontraban de servicio.

Los individuos, que actuaron a cara descubierta, huyeron en un vehículo que sustrajeron a un cliente del bar que llegaba en ese instante al establecimiento. Se ignora si los policías asesinados frecuentaban el bar del atentado o si se habían detenido circunstancialmente para llamar por teléfono. Fuentes de la Ertzairitza (policía autonómica vasca) barajaban anoche la hipótesis de que los terroristas hubieran identificado a los policías por la emisora que llevaba el vehículo, un Opel Corsa de color blanco.Según algunos testigos presenciales, uno de los activistas penetró en el bar y disparó repetidamente a corta distancia sobre el policía que hablaba por teléfono, mientras los otros miembro del comando tiroteaban al segúndo policía a través de la ventanilla del coche. Los policías recibieron en total 17 impactos de bala. A continuación, los terroristas obligaron a un cliente del bar a entregarles las llaves de su vehículo, y se alejaron del lugar del atentado en dirección a Bilbao.El vehículo, un Peugeot 505 gris con matrícula de Bilbao 3774-AD, fue encontrado media hora después del atentado frente al ambulatorio de la localidad vizcaína de Durango, a dos kilómetros del lugar en que se produjo el atentado. Especialistas en desactivación de explosivos inspeccionaron el coche en previsión de que tuviera alguna bomba trampa.El ministro del Interior, José Luis Corcuera, tiene previsto desplazarse hoy a Bilbao para asistir a los funerales por los policías asesinados, que se oficiarán a las diez de la mañana en la iglesia de San José, de los Padres Agustinos.Página 15

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