POLICÍAS ANTE LA JUSTICIA

El juez de los GAL propone a la sala el procesamiento de los policías Amedo y Domínguez

El juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, que investiga las conexiones de policías e instituciones con los GAL, propuso ayer a la Sala Tercera de lo Penal el procesamiento de los policías José Amedo Fouce y Michel Domínguez Martínez en su extenso y pormenorizado escrito que elevó a dicha sección junto con el sumario instruido hasta el momento. El juez Garzón ordenó recientemente la prisión incondicional de los dos policías ante los numerosos indicios de delito, testificales y documentales, y para evitar que eludan la acción de la justicia.

La sala deberá ahora estudiar el caso ...

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El juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, que investiga las conexiones de policías e instituciones con los GAL, propuso ayer a la Sala Tercera de lo Penal el procesamiento de los policías José Amedo Fouce y Michel Domínguez Martínez en su extenso y pormenorizado escrito que elevó a dicha sección junto con el sumario instruido hasta el momento. El juez Garzón ordenó recientemente la prisión incondicional de los dos policías ante los numerosos indicios de delito, testificales y documentales, y para evitar que eludan la acción de la justicia.

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La sala deberá ahora estudiar el caso para estimar si procede el procesamiento de los policías y confirmar o revocar la prisión de los funcionarios del Ministerio del Interior. La sala no dispone de ningún plazo para tomar una decisión aunque se espera que tome al menos alguna medida previa antes de agosto. La sala es la encargada de decretar el procesamiento de los policías porque disponen de fuero especial según la ley de Cuerpos y Fuerzas de la Seguridad del Estado.El juez Garzón fundamenta su propuesta de procesamiento a José Amedo y Michel Domínguez como presuntos autores de seis asesinatos frustrados y varios delitos de terrorismo. El magistrado explica extensamente los "indicios racionales de criminalidad" que inculpan de forma presunta como responsables a José Amedo Fouce y Michel Domínguez.

El magistrado expresa en su escrito que los hechos investigados se refieren a 1985 y 1986, aunque precisa que el subcomisario José Amedo participó en la creación y actividades de los GAL desde 1983. Michel Domínguez, según el juez, se incorporó a la banda terrorista en los primeros meses de 1984, pocas semanas después de ingresar en la Policía y concretamente en el servicio de información pura de la Jefatura de Bilbao.

Según el escrito judicial, los GAL (Grupos Antiterroristas de Liberación) surgieron a finales de 1983 con el objetivo de atentar contra miembros de la organización terrorista ETA, se organizaron grupos operativos sin conexión, "sin más punto de unión" que Amedo Fouce y los reclutadores de mercenarios.

El juez Garzón expone que Amedo, siguiendo órdenes o instrucciones de otras personas, asumió la función de organizador del grupo "contando con los medios de financiación precisos.". En 1984, cuando los GAL ya habían realizado el secuestro de Segundo Marey y los asesinatos de Ramón Oñaederra y Miguel Goikoetxea, Amedo se entrevistó con el súbdito francés Jean Philippe Labade, detenido en Portugal y buscado por la justicia francesa. A estas entrevistas le acompañó Michel Domínguez Martínez, y asistió siempre la compañera de Labade, Marie Jeanne Cassiede, quien lo ha reconocido en repetidas ocasiones ante la justicia de Francia.

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Labade fue acusado y condenado por el atentado contra Tomás Pérez Revilla junto a los mercenarios Roland Sampietro y Patrick de Carvalho. En los atentados anteriores están implicados los también mercenarios Raimond Sanchis, Mohamed Talbi y Pedro Sánchez, todos ellos con el policía Amedo Fouce.

El subcomisario de Policía contactó en Bayona (Francia) con Gerarld Manzanal, jefe de la sección de reclutamiento de la Legión Extranjera., para obtener información de activistas de ETA "a cambio de mucho dinero, según las propias palabras textuales de Gerard Manzanal quien les pidió que abandonaran el lugar dando cuenta a un superior".

En octubre de 1984, los policías Amedo y Domínguez "haciéndose llamar Thomas y Antoine, entran en contacto con Christian Hittier" a quien le propusieron "trabajar para el Gobierno español y cuya misión sería la de perseguir, capturar y en su caso eliminar a personas de ETA" para lo que se le pidió reclutar mercenarios" que serían pagados "con especie de salario o primas por ejecutar su trabajo". Hittier está reclamado por la justicia francesa y pendiente (le extradición de Bélgica.

Hittier, según el documento judicial, reclutó para los GAL en enero de 1985 a Patrick Pironeau, quien se reunió con Amedo y Domínguez a finales de ese mes en un café próximo a la comisaría de Irún. Después de varias reuniones Pironeau, inculpado en Francia por su participación con los GAL, recibió (de Domínguez 800.000 pesetas que ingreso en el Banco Popular de Burdeos. Pironeau presentó a los policías españoles a la denominada Dama Negra como reclutada para la organización. Al parecer, su identidad es Dominique Thomas, también inculpada por la justicia francesa.

Mientras ocurría todo ello, los GAL continuaban atentado contra activistas de ETA y residentes vascos en el sur de Francia, entre ellos el asesinato de Javier Galdeano por el que fueron condenados Alain Parmentier, Guy Cantavenera, Jacky Pinnar, Bernard Foucher y otros.

Por otros atentados fueron condenados Michel Morganti, Roger Rousee, Alain Lambert quienes fueron reclutados por Georges Mendailles. Éste se reunió con Amedo y Domínguez en Bagur (España) para tratar de calmar a la hermana de uno de los mercenarios detenido, Odett Russey. Los policías, que llegaron incluso a enseñar su placa profesional, han sido reconocidos por fotografías.

A continuación el juez relata el viaje de Amedo y Domínguez a Lisboa donde reclutaron a mercenarios portugueses que realizaron dos atentados en el sur de Francia en febrero de 1986. También expone las investigaciones e indicios de su supuesta organización del atentado al Moríbar, el más sangriento de los GAL. Ambos cuentan con el soporte de pruebas de la justicia francesa.

Las órdenes de no testificar eran "ilegales" según Garzón

El juez Baltasar Garzón califica de "¡legales" las órdenes cursadas por el ex ministro del Interior José Barrionuevo, a sus inferiores jerárquicos para que no respondieran sobre los fondos reservados del departamento. Esta afirmación la realiza el juez en su análisis a la respuesta de Barrionuevo y al informe de los Servicios Jurídicos del Estado que defendían esa negativa a informar.Los inferiores jerárquicos de Barrionuevo a los que se pidió esa información son el director general de la Policía, José María Rodríguez Colorado, el jefe Superior de Policía de Bilbao, Miguel Planchuelo, y los ex jefes de la Brigada Regional de Información de esa jefatura, Antonio Rosino y Julio Hierro Moset. Ambos fueron llamados a declarar como presuntos inculpados en la instrucción del sumario sobre la presunta implicación de policías e instituciones con los GAL.

El magistrado de la Audiencia Nacional considera "¡legales" las órdenes de Barrionuevo "a los efectos del artículo 371 del Código Penal, sin ningún tipo de apercibimiento, y en orden al tercer escrito de fecha 30-6-88". El juez Garzón estima que el ex ministro del Interior y sus inferiores están obligados a responder sobre esos fondos.

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