Amsterdam abandona su actitud, tolerante hacia los drogadictos

El 'autobús de la metadona' será sustituido por centros de desintoxicación

La adicción a múltiples drogas duras, su mezcla constante con alcohol y anfetaminas y una violencia extrema caracterizan a los yonquis del año 1988 que viven en Amsterdam. Se trata de un grupo compuesto por 7.000 personas, 2.500 de las cuales son de nacionalidad alemana, y entre las que apenas subsisten razones políticas: menos del 25% reconoce consumir heroína o cocaína por ese motivo.

Una encuesta elaborada por los servicios municipales de sanidad, han llevado al ayuntamiento de Amsterdan a poner en marcha un nuevo plan contra la drogadicción que excluye por vez primera de sus apartad...

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La adicción a múltiples drogas duras, su mezcla constante con alcohol y anfetaminas y una violencia extrema caracterizan a los yonquis del año 1988 que viven en Amsterdam. Se trata de un grupo compuesto por 7.000 personas, 2.500 de las cuales son de nacionalidad alemana, y entre las que apenas subsisten razones políticas: menos del 25% reconoce consumir heroína o cocaína por ese motivo.

Una encuesta elaborada por los servicios municipales de sanidad, han llevado al ayuntamiento de Amsterdan a poner en marcha un nuevo plan contra la drogadicción que excluye por vez primera de sus apartados el término tolerancia.Discutido conjuntamente con entidades privadas, policía y jueces, el proyecto trata de lograr la aceptación voluntaria del yonqui a someterse a un tratamiento de tres semanas, que puede evitarle la cárcel cuando ha delinquido. Si lo abandona, su caso puede ser abierto de nuevo y acabar en prisión. Una vez allí, tiene sin embargo otra posibilidad de tratarse y acortar la condena.

Con los extranjeros, entre los que también hay un 13% de italianos y un 8,5% de británicos, los métodos serán ahora más expeditos: la policía podrá ponerlos en la frontera tras su detención. Muchos empiezan a sobrepasar los 30 años y, el grupo más conflictivo, lo forman 200 personas que viven en la calle, y han precisado más de diez veces una cura de desintoxicación por sobredosis. Entre los menores de 25 años, los problemas psicológicos han derivado en una suerte de autodedicación, donde tranquilizantes y estimulantes se ingieren a la vez.

"Nuestro mayor problema ahora es que tenemos listas de espera de hasta tres meses para aplicar el nuevo tratamiento voluntario", afirma el doctor J. A. Walburg, director general del Jeflinekcentrum de Amsterdam, una de las entidades semiprivadas que trabaja en el sector.

Casos de amnesia

"Actualmente, 5.000 drogadictos utilizan los autobuses de la metadona, que ofrecen una dosis diaria. La situación se ha complicado con las mezclas de drogas duras y pastillas -añade- y, de los 2.500 yonquis que hemos censado, un 34% son drogadictos mientras un 17% consume sólo heroína. Con la poliadicción además se producen extraños casos de amnesia tras actos violentos que desconciertan a médicos e investigadores".Sólo un 5% de los menores de 22 aflos consumen drogas duras hoy en,Anisterdam. Sin embargo, 37.000 personas continúan teniendo serios problemas con el alcohol, de nuevo lo mezclan con afetaminas. "El 90% de las mujeres alcohólicas toma píldoras" dice Walburg "y lo grave es que tampoco tenemos derecho a forzar a nadie a una cura de desintoxicación. Creo que por eso el plan ha llegado tan tarde".

El próximo 16 de mayo el será discutido en el Parlamento que, de aprobarlo, favorecería también el incremento de los 40 trabajos al año que ahora se ofrecen a los pacientes ya desintoxicados por las autoridades y animaría a las entidades privadas a hacer lo propio.

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