Paz y objeción

Hace un mes aproximadamente se producía en Zaragoza, a raíz del atentado de ETA, una masiva manifestación a favor de la paz. "Zaragoza por la paz", rezaba la paricarta que la encabezaba. No dudamos que toda ciudad española, al igual que Zaragoza, que toda nación, que todo el mundo, estamparía su nombre en esa pancarta: "El mundo por la paz".Pues bien, a nosotros, que somos objetores de cctíciencia, que no queremos tener ninguna relación con el estamento militar ni con las armas que éste enseña a utilizar (armas que corno todas, en definitiva, disparan, matan y crean violencia), a nosotros, que...

Hace un mes aproximadamente se producía en Zaragoza, a raíz del atentado de ETA, una masiva manifestación a favor de la paz. "Zaragoza por la paz", rezaba la paricarta que la encabezaba. No dudamos que toda ciudad española, al igual que Zaragoza, que toda nación, que todo el mundo, estamparía su nombre en esa pancarta: "El mundo por la paz".Pues bien, a nosotros, que somos objetores de cctíciencia, que no queremos tener ninguna relación con el estamento militar ni con las armas que éste enseña a utilizar (armas que corno todas, en definitiva, disparan, matan y crean violencia), a nosotros, que estamos apostando el doble por la paz, se nos castiga por ello. Vamos a tener que realizar 18 meses de prestación social sustitutoria o se nos meterá de dos a seis años en la cárcel si no aceptamos este castigo. No entendemos esta contradicción. ¿En qué quedamos? ¿Es que es castigable apostar el doble por la paz?

Y que no nos vengan con que si quieres la paz prepárate para la guerra. Si quieres la paz, prepárate para la tolerancia, el amor, la libertad, la igualdad, la solidaridad, y olvídate de la prepotencia, la alienación, el egoísmo, la imposición. Cuando estas últimas se dan es cuando la persona se rebela y crea violencia.- Palencia.