Los países del Golfo firman un pacto para reforzar la seguridad en la zona

Los dirigentes de los países ribereños pertenecientes al Consejo de Cooperación del Golfo Pérsico (CCG), reunidos en Riad, decidieron ayer aprobar un pacto destinado a reforzar la seguridad en la zona, amenazada por la, guerra que desde hace más de siete años mantienen Irán e Irak según informó a la Prensa el príncipe Saud al Faisal, ministro de Asuntos Exteriores de Arabi Saudí. El pacto, que estaba sien do estudiado desde 1982, establece unas amplias bases para la cooperación en materia de seguridad entre los países miembros del CCG, Arabia Saudí, Kuwait, Omán, Qatar, Bahrain y los Emiratos ...

Los dirigentes de los países ribereños pertenecientes al Consejo de Cooperación del Golfo Pérsico (CCG), reunidos en Riad, decidieron ayer aprobar un pacto destinado a reforzar la seguridad en la zona, amenazada por la, guerra que desde hace más de siete años mantienen Irán e Irak según informó a la Prensa el príncipe Saud al Faisal, ministro de Asuntos Exteriores de Arabi Saudí. El pacto, que estaba sien do estudiado desde 1982, establece unas amplias bases para la cooperación en materia de seguridad entre los países miembros del CCG, Arabia Saudí, Kuwait, Omán, Qatar, Bahrain y los Emiratos Arabes Unidos.Se espera que la reunión de CCG en Riad, que finaliza hoy, pida al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que renueve su llamamiento para un alto el fuego en la guerra del Golfo y censure duramente a Irán por sus recientes ataques contra instalaciones petrolíferas kuwaitíes.

Kuwait, por su parte, insistió ayer, durante la reunión, en que los países miembros del CCG adopten una estrategia militar común contra las agresiones a los países miembros. El emir de Kuwait, Jaber el Amad al Saban, se dirigió a los demás líderes árabes diciéndoles que ya no se podían contentar con una solidaridad "de fachada", y que los países miembros debían tomar medidas concretas para hacer frente a las agresiones.

Asimismo, los países del CCG hicieron un llamamiento a la Unión Soviética, como miembro del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, para que se sume al embargo de armas contra Irán.

Japón, por otra parte, decidió ayer disminuir sus compras de crudo a Irán, especialmente en contratos a largo plazo, tras la fuerte presión estadounidense para que Tokio reduzca su dependencia energética de Teherán. Los refinadores y comerciantes japoneses han decidido reducir sus compras diarias de crudo iraní en un 30%.