Descubierta una bomba ante la sede de la ASEAN en Manila

Una bomba de relojería de gran potencia fue descubierta ayer por la policía filipina en Manila ante el edificio sede del Ministerio de Asuntos Exteriores, donde está previsto se celebre el próximo 14 de diciembre la cumbre de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN).El hecho ocurrió horas antes de que el responsable de Exteriores filipino, Raúl Manglapus, saliera de Manila para una gira que tiene como objetivo preparar la cumbre de ASEAN y eliminar las reticencias de algunos de los países miembros a que la mencionada reunión se celebre en Manila, porque consideran q...

Una bomba de relojería de gran potencia fue descubierta ayer por la policía filipina en Manila ante el edificio sede del Ministerio de Asuntos Exteriores, donde está previsto se celebre el próximo 14 de diciembre la cumbre de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN).El hecho ocurrió horas antes de que el responsable de Exteriores filipino, Raúl Manglapus, saliera de Manila para una gira que tiene como objetivo preparar la cumbre de ASEAN y eliminar las reticencias de algunos de los países miembros a que la mencionada reunión se celebre en Manila, porque consideran que no hay suficientes garantías de seguridad para los asistentes.

Según informó la policía filipina, la bomba estaba constituida por 83 barras de dinamita, pero no tenía detonantes, por lo que no hubiese estallado. Ello hace suponer a las autoridades que el incidente forma parte de una maniobra para lograr la cancelación de la cumbre, tal como ha pedido en numerosas ocasiones la oposición filipina.

Por su parte, el Gobierno ha rechazado esta posibilidad, que consideran constituye un intento para desacreditar a la presidenta Aquino en el marco de los intentos de desestabilización que han seguido al último intento de golpe de Estado del pasado agosto. El Gobierno considera que anular la cumbre equivaldría a una bofetada a la presidenta.

La guerrilla comunista filipina hizo pública en una entrevista publicada ayer por el diario filipino Financial Post su decisión de atacar a residentes norteamericanos en Filipinas como represalia por la presencia de Estados Unidos en el archipiélago. Esta advertencia sigue al reciente asesinato de tres miembros de las fuerzas aéreas de EE UU en Filipinas.