El crecimiento de la cantidad de dinero en circulación en el mes de agosto volvió a superar las previsiones del Gobierno

El crecimiento de la cantidad de dinero en circulación en el pasado mes de agosto ha sufrido un acelerado aumento con una desviación significativamente elevada respecto a los objetivos establecidos por el Gobierno para el conjunto del año, según los datos provisionales que maneja el Banco de España.El fuerte aumento del crédito al sector privado de la economía, la continua entrada de divisas y el proceso de colocación de letras del Tesoro entre los inversores individuales explican que de nuevo en agosto el Banco de España perdiera el control monetario. En los próximos días se tomará la decisió...

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El crecimiento de la cantidad de dinero en circulación en el pasado mes de agosto ha sufrido un acelerado aumento con una desviación significativamente elevada respecto a los objetivos establecidos por el Gobierno para el conjunto del año, según los datos provisionales que maneja el Banco de España.El fuerte aumento del crédito al sector privado de la economía, la continua entrada de divisas y el proceso de colocación de letras del Tesoro entre los inversores individuales explican que de nuevo en agosto el Banco de España perdiera el control monetario. En los próximos días se tomará la decisión formal, aunque de hecho ya está vigente, de revisar al alza el objetivo de crecimiento monetario para el conjunto del año.

Los datos de que dispone el Banco de España sobre la evolución del crecimiento monetario en el pasado mes de agosto muestran una fuerte desviación sobre los objetivos establecidos (aumento del 8% para el conjunto del año) que es continuación de las experimentadas en los meses anteriores. El crecimiento monetario acumulado al mes de julio se situó en el 13%, cinco puntos por encima de las previsiones y en agosto se mantendrá en torno a esta cifra.

Estos fuertes aumentos han empezado a preocupar menos a las autoridades económicas y monetarias que, en los proximos días reconocerán de forma oficial la revisión al alza de los objetivos justificándolos por el espectacular crecimiento económico real y el relativo buen comportamiento de los precios que no parecen estar acusando el aumento de la cantidad de dinero en circulación. De esta forma tomará cuerpo el cambio de objetivo del 8% a una cifra cercana al 10%, es decir la parte alta de la senda objetivo establecida por el Gobierno a primeros de año.

Las explicaciones para el mantenimiento de unas tasas de aumento del dinero en circulación muy por encima de lo previsto, a pesar de las restricciones monetarias que se pusieron en marcha en los primeros meses del año, tienen su origen según los expertos del Banco de España en el fuerte incremento del crédito concedido al sector privado de la economía, que con cifras del último día del mes de julio, aumentó casi en la misma cantidad que en el resto del año, en la continuada entrada de divisas consecuencia de los elevados tipos de interés de la economía española y de la temporada turística, y por el proceso de cesión a particulares de una cantidad importante de letras del Tesoro.

Desde que entró en funcionamiento el sistema de anotaciones en cuenta para las letras del Tesoro en el mes de julio las emisiones totales de este activo supera los 1,46 billones de pesetas de los que casi 900.000 millones de pesetas han sido colocados entre inversores privados (empresas y particulares), lo que provoca fuertes crecimientos de los agregados monetarios. Una parte de estos títulos han sustituido a los vencimientos de pagarés del Tesoro que han tenido lugar en estos dos meses pero otra parte representan financiación neta nueva al Estado.

Bajar los tipos

La revisión al alza de los objetivos monetarios va a representar un relajamiento en las tensiones del precio del dinero, que ya viene bajando lentamente desde hace algunas semanas, pero no parece que se vaya a asistir, al menos de momento, a la reducción de tipos de interés que tuvo lugar hace año y medio.De hecho, las reducciones que efectúa el Banco de España en las subastas de préstamos de regulación están teniendo lugar de forma muy lenta, lo mismo que está ocurriendo con la resolución de las subastas quincenales de letras del Tesoro. Los temores que justifican no reducir los tipos de interés de forma más rápida a pesar de la revisión de los objetivos monetarios se centran en que, dada la tendencia de la economía española, una medida de este tipo podría provocar mayores incrementos de la demanda interna que no haría sino incrementar el déficit comercial.

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