Reportaje:

José María Valero

Responsable del proyecto de recuperación del patrimonio más ambicioso de Aragón, colecciona viejos tranvías

El arquitecto José María Valero es el responsable del servicio de restauraciones de la Diputación Provincial de Zaragoza, que en los últimos meses ha recuperado 110 municipios en 198 pueblos, 27 retablos, tallas y pinturas y 20 órganos de música, además de danzas y otras costumbres populares. Valero une a su dedicación total a las restauraciones una loca pasión: coleccionar tranvías. Posee 27 de esos vehículos en su pueblo natal de Egea de los Caballeros, en la provincia de Zaragoza.

José María Valero se entusiasma cuando habla de la labor realizada en la restauración y recuperación...

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El arquitecto José María Valero es el responsable del servicio de restauraciones de la Diputación Provincial de Zaragoza, que en los últimos meses ha recuperado 110 municipios en 198 pueblos, 27 retablos, tallas y pinturas y 20 órganos de música, además de danzas y otras costumbres populares. Valero une a su dedicación total a las restauraciones una loca pasión: coleccionar tranvías. Posee 27 de esos vehículos en su pueblo natal de Egea de los Caballeros, en la provincia de Zaragoza.

José María Valero se entusiasma cuando habla de la labor realizada en la restauración y recuperación del patrimonio por la diputación de Zaragoza en los últimos siete años. Estas actividades han sido mostradas al público en una exposición en la que destacaban dos cuadros encontrados, uno de Van Dyck y uno de José Ribera.Uno de los mayores orgullos profesionales de Valero es la restauración del patio de los Condes de Sástago. Esta obra mereció la medalla de oro de Europa Nostra. "De lo que más satisfecho me siento es de haber redescubierto el patio, que no se conocía". Siguiendo el plano de la construcción original del edificio, la rehabilitación se llevó a cabo con los materiales primitivos, alabastro y azulejos traídos de pueblos de la provincia.

La labor de recuperación iniciada por el ex presidente de la Diputación, Gaspar Castellano, ha continuado con el actual presidente en funciones, Carlos Alegre. "Primero se llevó a los pueblos lo más fundamental, el agua, el asfaltado; y tras salir de esa noche negra se iniciaron las restauraciones", dice Valero. Añade que respecto a edificio histórico-artísticos primero se ha atendido lo más necesario, los cimientos y retejar. "Hemos acudido un poco en plan UVI. En los próximos años la diputación intervendrá en lo más delicado del patrimonio".

Valero resalta la labor en equipo y "la magnífica colaboración de los vecinos". En estos años de trabajo las sorpresas han sido muchas: descubrir un retablo gótico del XV debajo de otro repintado o el hallazgo de cuadros de Van Dyck y Ribera.

José María Valero confiesa que goza yendo a los pueblos Tiene cientos de anécdotas: más de una vez pasó que al ir a una localidad donde le habían llamado porque se caía la torre descubrió en una pequeña ermita, y "bajo las goteras, un espléndido retablo gótico". Otras veces el valor artístico estaba en las tejas o en los techos del edificio. El patrimonio recuperado "estaba en general muy mal tratado y descuidado", asegura.

La gran pasión privada de este arquitecto son los tranvías. Desde niño vivió frente a unas cocheras y observaba sus entradas y salidas. Esa afición le ha llevado a poseer una colección de 27, que ha ido pagando a plazos. Los fines de semana los dedica, "brocha en mano y con la fija", a restaurar los viejos tranvías. "Hasta que no vuelva a verlos circular de nuevo por Zaragoza no pararé", dice, al tiempo que manifiesta su agrado por el proyecto de Barcelona de recuperar los tranvías para los Juegos de 1992. En este sentido, lamenta la desaparición de Enrique Tierno Galván, que proyectaba también recuperar los tranvías en Madrid.

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