TRIBUNALES

Condenado un médico que dejó un plástico en el interior de un paciente

El médico José Luis Sáenz Fernández ha sido condenado a pagar una indemnización de dos millones de pesetas a un paciente al que, tras practicarle una intervención quirúrgica en 1982, le dejó un objeto extraño de material plástico incrustado en el hipocondrio derecho. El fallo condenatorio fue emitido por el juez número 1 de primera instancia de Madrid, Alfredo Roldán Herrero, el pasado 22 de junio, y en él se anota que el demandante, Juan Antonio Martín Herraiz, aún lleva en el interior de su cuerpo el objeto plástico.

La operación quirúrgica -una colecistectomía y gastrectom...

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El médico José Luis Sáenz Fernández ha sido condenado a pagar una indemnización de dos millones de pesetas a un paciente al que, tras practicarle una intervención quirúrgica en 1982, le dejó un objeto extraño de material plástico incrustado en el hipocondrio derecho. El fallo condenatorio fue emitido por el juez número 1 de primera instancia de Madrid, Alfredo Roldán Herrero, el pasado 22 de junio, y en él se anota que el demandante, Juan Antonio Martín Herraiz, aún lleva en el interior de su cuerpo el objeto plástico.

La operación quirúrgica -una colecistectomía y gastrectomía subtotal- fue efectuada, según consta en la sentencia, el 14 de enero de 1982 en la clínica San Ignacio, de la cual el médico demandado era en ese momento copropietario. En septiembre de 1984, al someterse Martín Herraiz a una revisión en el servicio de urología del hospital de la Cruz Roja, se dictaminó que padecía una infección urinaria y que en el hipocondrio derecho se observaba una "imagen alargada de material plástico que podría estar relacionada con su cirugia de colelitiasis". El informe médico aconsejaba la extracción del objeto extraño.

El juez desestimó los argumentos de la defensa, que insistía, entre otros puntos, en la caducidad y prescripción de la acción y en que el demandante ha sufrido más de una operación que podría estar relacionada con la existencia del residuo plástico. En el fallo condenatorio se justifica la indemnización de dos millones de pesetas "habida cuenta de los riesgos de una anestesia general" en la intervención que presumiblemente será practicada al demandante para la extracción del plástico.

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