LA RUPTURA DIPLOMÁTICA

El Consejo de Seguridad "exigirá" un alto el fuego en la guerra Irán-Irak

El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas se reunirá mañana para pronunciarse sobre un proyecto de resolución que, por primera vez desde que se inició la guerra entre Irán e Irak, "exigirá" un alto el fuego inmediato y que los dos ejércitos se retiren a las fronteras internacionalmente reconocidas. El amenaza con sanciones si una de las partes rechaza la petición del Consejo. Por su parte, el presidente de EE UU, Ronald Reagan y la primera ministra británica, Margaret Thatcher han pedido al secretario general de la ONU, Javier Pérez de Cuéllar que viaje a Bagdad y a Teherán.Esta guerra ha...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas se reunirá mañana para pronunciarse sobre un proyecto de resolución que, por primera vez desde que se inició la guerra entre Irán e Irak, "exigirá" un alto el fuego inmediato y que los dos ejércitos se retiren a las fronteras internacionalmente reconocidas. El amenaza con sanciones si una de las partes rechaza la petición del Consejo. Por su parte, el presidente de EE UU, Ronald Reagan y la primera ministra británica, Margaret Thatcher han pedido al secretario general de la ONU, Javier Pérez de Cuéllar que viaje a Bagdad y a Teherán.Esta guerra ha despertado en las últimas semanas el mismo temor que en sus inicios, hace siete años: el riesgo de generalización del conflicto. La decisión norteamericana de escoltar a partir del próximo miércoles a 11 petroleros kuwaitíes en el golfo Pérsíco, que Irán califica de provocación, puede convertirse en el pretexto que lleve al Gobierno de ese país, cada vez más nervioso por su progresivo aislamiento internacional, a dar un paso irreversible.

Más información

Cuando, en septiembre de 1980, ambos contendientes se enzarzaron en la lucha, la mayor preocupación en el Este y, sobre todo, en el Oeste fue que una generalización del conflicto estrangulara la principal vía de salida del petróleo de la zona: el golfo Pérsico (golfo Arábigo, para los árabes).

Motivos de inquietud no faltaban. Esa región del globo produce aproximadamente el 40% del petróleo que necesitan los países no comunistas, y los efectos de un corte en el flujo del oro negro hubieran sido catastróficos. El paso de los meses tranquilizó a los importadores, que vieron con satisfacción cómo la guerra se circunscribía a la frontera iranoiraquí.

El inicio, en 1984, de la llamada guerra de los petroleros volvió a alertar a las cancillerías occidentales. Cerca de 320 barcos -en su mayoría petroleros- han resultado atacados desde entonces, pero el peligro ha redundado más en un incremento de las primas de los seguros que en una verdadera merma de la navegación. Esto, unido a la construcción de varios oleoductos, ha permitido mantener casi sin variación el abastecimiento de petróleo.

El precipicio

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Hoy, la guerra se encuentra estancada, y se ha convertido en una sangría económica para ambos contendientes, pero los incidentes ocurridos en aguas del Golfo en las últimas semanas han vuelto a aproximar el conflicto al precipicio de la internacionalización y han puesto en evidencia el progresivo aislamiento de Irán. El régimen de Teherán acusa a los países occidentales, y en especial a Francia, de vender armas a Irak. Y en ese contexto se enmarcan sus ataques en la navegacion en el golfo Pérsico y los conflictos diplomáticos que sostiene con París, Londres y Washington.

Archivado En