TRIBUNALES

'El Pistolas' negó en su juicio ser miembro de ETA

Gregorio Jiménez Morales, el Pistolas, presunto miembro de ETA militar detenido en Costa Rica en 1983, y entregado a las autoridades españolas en mayo de 1986, fue juzgado ayer en la Audiencia Nacional acusado de diversos delitos, por los que el fiscal solicita para él penas que totalizan 60 años de prisión. Jiménez negó ante el tribunal que perteneciera o hubiera pertenecido en el pasado a ETA Militar y rechazó las acusaciones del fiscal que le imputa, entre otras acciones, la colocación de explosivos en torres de Iberduero.El fiscal le acusa de delitos de pertenencia a banda armada, e...

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Gregorio Jiménez Morales, el Pistolas, presunto miembro de ETA militar detenido en Costa Rica en 1983, y entregado a las autoridades españolas en mayo de 1986, fue juzgado ayer en la Audiencia Nacional acusado de diversos delitos, por los que el fiscal solicita para él penas que totalizan 60 años de prisión. Jiménez negó ante el tribunal que perteneciera o hubiera pertenecido en el pasado a ETA Militar y rechazó las acusaciones del fiscal que le imputa, entre otras acciones, la colocación de explosivos en torres de Iberduero.El fiscal le acusa de delitos de pertenencia a banda armada, estragos, robos, utilización ¡legítima de vehículo a motor, tenencia ilícita de armas y depósito de explosivos.

Según el fiscal, entre 1980 y abril de 1982 en que huyó a Francia, Jiménez era el jefe del comando Andatza de ETA Militar, con el que realizó diversos atentad¿s con explosivos contratorres de suministro de la empresa Iberduero, el robo de material en una oficina de Tolosa (Guipúzcoa) y el robo de un coche que posteriormente fue utilizado en una acción delictiva.

En el juicio, Jiménez negó tener relación con ETA, así como que hubiera colaborado en acciones de la organización. Dijo que abandonó España porque se sentía perseguido y amenazado por el Batallón Vasco Español, pues él participaba en actividades pro amnistía. Añadió que esa fue también la razón que le impulsó a abandonar el sur de Francia hacia Costa Rica, y que cuando llevaba poco tiempo en aquel país se aprovecharon de él para un montaje político en contra de las autoridades de Nicaragua.

Precisó que el apodo de El Pistolas le viene de un tío suyo que también tuvo el mote debido a una característica fisica de la familia.

Declaró como testigo José Miguel Arbelegui, miembro del comando Andatza de ETA, que ya está condenado por los atentados que imputan a Jiménez. Este etarra se negó a contestar al fiscal, pero dijo que no tenía noticia de que Jiménez colaborara o perteneciera a ETA. Este mismo testigo, hace años, implicó a Jiménez en los atentados.

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