Cartas al director

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En relación con el artículo Iberia blues en una España encorsetada (EL PAÍS, 9 de abril), firmadopor el catedrático de Lógica y Filosofía de la Ciencia de la universidad de Barcelona don Jesús Mosterín, los abajo firmantes queremos expresar nuestra opinión:Nos produce escalofríos pensar si la docencia universitaria puede estar en manos, o en la cabeza, de personas que, como el firmante de este artículo, utilizan el simplismo más absoluto y los lugares comunes más habituales.

De una lectura detenida de dicho artículo cabe llegar a la conclusión de que el señor Mosterín tend...

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En relación con el artículo Iberia blues en una España encorsetada (EL PAÍS, 9 de abril), firmadopor el catedrático de Lógica y Filosofía de la Ciencia de la universidad de Barcelona don Jesús Mosterín, los abajo firmantes queremos expresar nuestra opinión:Nos produce escalofríos pensar si la docencia universitaria puede estar en manos, o en la cabeza, de personas que, como el firmante de este artículo, utilizan el simplismo más absoluto y los lugares comunes más habituales.

De una lectura detenida de dicho artículo cabe llegar a la conclusión de que el señor Mosterín tendría más éxito como experto en caricaturas que como sesudo catedrático de Lógica y Filosofía, dado que el análisis que hace es más propio del teatro del absurdo de lonesco.

Señor Mosterín, ¿recuerda usted la frase de Ortega: "Yo soy yo y mi circunstancia y si no la salvo a ella no me salvo yo"? ¿No tiene usted capacidad de análisis de las circunstancias? ¿No se sonroja usted al plantear premisas tan elementales?

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Las personas que trabajamos en Iberia, que, sin ser catedráticos en ninguna disciplina, nos conformamos con tratar de ser buenos profesionales, en cifra de 25.000, estamos bastante hartos de que caballeros como el señor Mosterín se olviden de que seamos poseedores de una puntualidad que nos sitúa entre el primero y el segundo puesto de las compañías aéreas de la Asociación Europea de Líneas Aéreas (AEA), con un 91 %.

Ignoramos los periódicos que este señor es capaz de leer al día, aunque entendemos que pocos. Pero Iberia se gasta 600 millones de pesetas anuales en Prensa diaria. ¡Vaya, hombre! ¡Usted no ha encontrado periódicos a bordo de nuestros aviones!

Verá, usted debe viajar un poco más. La dotación de Prensa del puente aéreo está a libre disposición del pasajero en la sala de embarque de dicha línea. La verdad es que ni filósofos ni psicólogos tienen problemas en encontrarlos y usted sí. Honradamente, nos preocupa.

El señor Mosterín habla de monopolio cuando puede viajar desde España a cualquier país del mundo con numerosas compañías aéreas, que operan en competencia con Iberia en trayectos internacionales.

¡Mira que hablar de libre competencia, cuando todo el mundo sabe que a Iberia no se le permite volar entre, por ejemplo, París y Niza, o Londres y Manchester, o Roma y Milán!

El señor Mosterín ignora muchas cosas, entre ellas, que el catering que sirve las comidas a bordo de los aviones de Iberia, denominado Iberswiss, sea una sociedad constituida por Iberia y Swissair, compañía aérea que está especialmente considerada por su excelente servicio.

En definitiva, lo que hemos leído acerca de que el señor Mosterín considere que los empleados de Iberia seamos unos sádicos para con los pasajeros, cuando todos nuestros mejores esfuerzos van dirigidos, precisamente, a satisfacer todas y cada una de sus necesidades, nos hace, con toda humildad, recomendar a tan ilustre pensador que, para una interpretación sadiana de la existencia, se remita al ensayo que Roland Barthes escribió sobre el marqués de Sade.

A fin de cuentas, posiblemente lo que más moleste al tan citado señor Mosterín sea el libre ejercicio de la huelga en un país democrático. Sin duda, el señor Mosterín añora aquellos países democráticos en los que la solución de las huelgas es el despido masivo. Para una más amplia documentación, le remitimos a La sociedad abierta y sus enemigos, de Karl Popper; sin duda alguna, este señor conocerá la obra.

Concluyendo: estamos bastante hartos de que el señor Mosterín, siendo catedrático de Lógica y Filosofía, tenga una visión internacional que no pasa más allá de los Pirineos, sea tan poco riguroso a la hora de analizar situaciones y hechos y que la cabeza se le caliente con tan poca brillantez.- y 15 firmas más. Trabajadores de Iberia.

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