Las sociedades que facturen mas de 480 millones deberán auditarse

La realización de una auditoría externa de las cuentas anuales y del de gestión de las sociedades anónimas será obligatoria, por primera vez en España, a partir del año próximo, una vez que el Gobierno apruebe la nueva ley de Sociedades Anónimas -que sustituirá a la del año 1951-, cuyo anteproyecto ya ha sido elaborado por la Comisión de Codificación.La nueva normativa afectará a las sociedades anónimas que cumplan al menos dos de las siguientes condiciones: que el activo reflejado en balance supere los 230 millones de pesetas, que su cifra anual de negocios esté por encima de los 480 millones...

La realización de una auditoría externa de las cuentas anuales y del de gestión de las sociedades anónimas será obligatoria, por primera vez en España, a partir del año próximo, una vez que el Gobierno apruebe la nueva ley de Sociedades Anónimas -que sustituirá a la del año 1951-, cuyo anteproyecto ya ha sido elaborado por la Comisión de Codificación.La nueva normativa afectará a las sociedades anónimas que cumplan al menos dos de las siguientes condiciones: que el activo reflejado en balance supere los 230 millones de pesetas, que su cifra anual de negocios esté por encima de los 480 millones de pesetas y que el número medio de empleados durante el ejercicio sea mayor de 50.

Por otra parte, el último borrador de la ley de Auditoría establece que, además, estarán obligadas a auditarse las empresas que coticen sus títulos en cualquiera de las bolsas oficiales de comercio, las que emitan acciones u obligaciones en oferta pública, las compañías de seguros y los futuros fondos de pensiones, las que reciban subvenciones, ayudas, créditos o avales de entidades oficiales o presten algún tipo de servicio al Estado. También se incluyen las sociedades de garantía recíproca y las cooperativas.

Los auditores, según la nueva ley de Sociedades Anónimas, tendrán que comprobar si las cuentas anuales ofrecen la imagen Fiel del patrimonio, la situación financiera y los resultados de la sociedad, así como la concordancia del informe de gestión con las cuentas anuales del ejercicio. Si no hay problema, expedirán una certificación.