Los vendedores del Rastro desconfían de la vigilancia de la Policía Municipal

Los vendedores callejeros del Rastro han expresado su desconfianza por el servicio de control de su actividad que realizan 100 policías municipales desde el pasado domingo. Los vendedores que superan los 4.000, ven tras esta medida "un intento arbitrario por parte del Ayuntamiento de poner unos límites al Rastro sin contar con los afectados".Mari Sol Lázaro, miembro de la Coordinadora de Colectivos de Vendedores del Rastro (Codeco), se mostró partidaria de una regulación del mercadillo "siempre y cuando no se haga de espaldas a los vendedores". Lázaro se refirió a "la falta de entendimiento co...

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Los vendedores callejeros del Rastro han expresado su desconfianza por el servicio de control de su actividad que realizan 100 policías municipales desde el pasado domingo. Los vendedores que superan los 4.000, ven tras esta medida "un intento arbitrario por parte del Ayuntamiento de poner unos límites al Rastro sin contar con los afectados".Mari Sol Lázaro, miembro de la Coordinadora de Colectivos de Vendedores del Rastro (Codeco), se mostró partidaria de una regulación del mercadillo "siempre y cuando no se haga de espaldas a los vendedores". Lázaro se refirió a "la falta de entendimiento con el Ayuntamiento, y muy en especial con el presidente de la Junta de Centro, Miguel Lara, con quien no nos hemos reunido desde hace dos años".

Los agentes que prestan sus servicios en el Rastro distribuyeron entre los vendedores unas hojas informativas. En ellas se comunicaba la prohibición de vender productos alimenticios y la necesidad del que todos los vehículos de transporte salieran del Rastro antes de las 9.30.

La policía impidió que se instalaran los puestos en la calle del Duque de Alba y en la plaza de Tirso de Molina el domingo pasado. Según varios vendedores, los agentes advirtieron también que el próximo domingo no podrán instalarse ni en la calle de Embajadores ni en la Puerta de Toledo. "Los vendedores no sabemos de dónde ha partido la decisión de delimitar arbitrariamente el Rastro", dijo Lázaro.

Los vendedores se muestran favorables a la vigilancia para prevenir robos, pero lamentan que el control "se dirija exclusivamente" hacia ellos. "Como si fuéramos los delincuentes". Los afectados han convocado una manifestación en la plaza de la Villa para el jueves a la once de la mañana.

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