ELA-STV ha conseguido casi el 40% de los delegados elegidos hasta el 15 de noviembre

El sindicato nacionalista ELA-STV ha obtenido, hasta el 15 de noviembre, 3.147 delegados en la Comunidad Autónoma Vasca, lo que supone el 39,65% de todos los representantes elegidos, según los datos hechos públicos ayer por el consejero de Trabajo en funciones del Gobierno vasco, Jon Azúa. UGT ha logrado hasta ahora 1.670 delegados, y CC OO, 1.257.

De acuerdo con los datos de la Consejería de Trabajo del Gobierno vasco, desde el 1 de octubre al 15 de noviembre se han elegido en la Comunidad Autónoma Vasca 7.937 delegados, delos que 6.074 -el 76,53%- han correspondido a los sindicato...

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El sindicato nacionalista ELA-STV ha obtenido, hasta el 15 de noviembre, 3.147 delegados en la Comunidad Autónoma Vasca, lo que supone el 39,65% de todos los representantes elegidos, según los datos hechos públicos ayer por el consejero de Trabajo en funciones del Gobierno vasco, Jon Azúa. UGT ha logrado hasta ahora 1.670 delegados, y CC OO, 1.257.

De acuerdo con los datos de la Consejería de Trabajo del Gobierno vasco, desde el 1 de octubre al 15 de noviembre se han elegido en la Comunidad Autónoma Vasca 7.937 delegados, delos que 6.074 -el 76,53%- han correspondido a los sindicatos de carácter representativo. El resto ha quedado repartido entre otras formaciones. LAB ha logrado 718 representantes y USO ha alcanzado los 255 delegados. En el capítulo de otros se incluyen 487 representantes; 8, corresponden a coaliciones y 395 son delegados no sindicados.

Las elecciones se han celebrado en 3.513 empresas, con un censo de 155.544 trabajadores. El número de votos emitido fue de 126.140. En Vizcaya, ELA-STV ha conseguido 1.433 delegados; UGT, 908, y CC OO, 583. La central nacionalista también ha conseguido el primer puesto en Álava y Guipúzcoa.

Jon Azúa precisó que el "proceso electoral se está desarrollando en total normalidad y sin ninguna incidencia negativa importante en los centros de trabajo donde se está celebrando". Según el consejero de Trabajo, las incidencias han sido políticas y estaban basadas en "actitudes previas de algunas centrales sindicales".

Al mismo tiempo, precisó que la postura del Ejecutivo vasco había sido la de intentar garantizar la neutralidad, "ya que desde 1982 se han producido modificaciones electorales, con la entrada del Gobierno socialista, que podían beneficiar a un sindicato concreto".

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