Muere en una prisión de la URSS el escritor disidente Anatoli Marchenko

El escritor disidente Anatoli Marchenko, autor de un libro sobre la vida en los campos de trabajo de la Unión Soviética, murió en un hospital penitenciario de una hemorragia cerebral después de una larga enfermedad, anunció ayer un funcionario soviético.

Marchenko, de 48 años de edad, había sido sentenciado en septiembre de 1981 a 10 años de reclusión en un campo de trabajo y a cinco años más de exilio interno después de haber sido declarado culpable de "agitación y propaganda antisoviética".Un amigo de la familia dijo que ésta había recibido un telegrama el martes de la esposa de March...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El escritor disidente Anatoli Marchenko, autor de un libro sobre la vida en los campos de trabajo de la Unión Soviética, murió en un hospital penitenciario de una hemorragia cerebral después de una larga enfermedad, anunció ayer un funcionario soviético.

Marchenko, de 48 años de edad, había sido sentenciado en septiembre de 1981 a 10 años de reclusión en un campo de trabajo y a cinco años más de exilio interno después de haber sido declarado culpable de "agitación y propaganda antisoviética".Un amigo de la familia dijo que ésta había recibido un telegrama el martes de la esposa de Marchenko, Larisa Bogoraz, desde Chistopol, una ciudad a 800 kilómetros al este de Moscú, donde Marchenko estaba preso, informando de la muerte de su marido.

El secretario de Estado norteamericano, George Shultz, expresó sus condolencias a Bogoraz, y en unas declaraciones efectuadas en su vuelo hasta Bruselas dijo: "Esto es parte de las continuas violaciones de la Unión Soviética en la aplicación de los acuerdos en materia de derechos humanos".

Marchenko se hizo famoso por la publicación de su libro Mi testimonio, publicado en Occidente en 1967, que fue recibido por la crítica como uno de los relatos más emocionantes de la vida en los campos de trabajo. Renunció a la ciudadanía soviética en 1974, pero le negaron el permiso para emigrar a Estados Unidos.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En