Tribuna:

Todavía se mantienen las dudas en los mercados

La irregularidad, es la nota más característica de un mercado que no consigue recuperar la confianza perdida tras los fuertes recortes de la semana anterior. Los escasos intentos reactivadores se han visto reducidos a un mejor ambiente en el sector eléctrico y a unos cuantos casos aislados con mayor incidencia en el grupo químico. Los volúmenes de contratación continúan indicando que la reserva del dinero es casi absoluta, con un descenso de la media diaria de este mes hasta casi los 10.500 millones de pesetas efectivas, debido a que en la semana anterior tan sólo se alcanzó ese nivel en una o...

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La irregularidad, es la nota más característica de un mercado que no consigue recuperar la confianza perdida tras los fuertes recortes de la semana anterior. Los escasos intentos reactivadores se han visto reducidos a un mejor ambiente en el sector eléctrico y a unos cuantos casos aislados con mayor incidencia en el grupo químico. Los volúmenes de contratación continúan indicando que la reserva del dinero es casi absoluta, con un descenso de la media diaria de este mes hasta casi los 10.500 millones de pesetas efectivas, debido a que en la semana anterior tan sólo se alcanzó ese nivel en una ocasión, acercándose las cifras más a la media anual, que ya roza los 7.000 millones de pesetas.Esta ausencia casi general de intenciones compradoras se ve, justificada por la falta de respuesta del mercado a los tanteos y tomas de posiciones que se registraron al final del cielo anterior, y cuyo eco en el sector eléctrico no ha sido más que discreto. Sin embargo, esas pequeñas subidas han sido suficientes para amortiguar el efecto de los recortes registrados todavía por el resto del mercado, incluidas banca y comunicaciones. El resultado ha sido una sesión en la que los índices generales de las cuatro bolsas no han variado más de 31 centésimas.

Dentro del sector eléctrico, han reaccionado mejor los valores de primera fila, manteniéndose los demás con unas discretas pérdidas. Nuevamente se ha puesto de manifiesto la poca capacidad del mercado, en estos momentos, para acusar las buenas noticias, pues el dividendo adicional que ha anunciado Fecsa ha pasado casi desapercibido. Tampoco en el sector bancario han ido mejor las cosas, ya que el papel continúa siendo el claro dominador de las cajas. El número de títulos que quedaron sin contrapartida compradora entre los siete grandes descendió por debajo de los 300.000, mientras que los títulos negociados se mantienen en torno a los 440.000. Tres repeticiones ha sido el dato más positivo dentro de este pequeño grupo, al tiempo que las bajas han oscilado entre 8 y 10 enteros.

BNP España inició una ampliación de capital en la proporción de una acción nueva por cada cinco antiguas a la par, esto es, con un desembolso de 75 pesetas por acción, habiendo descontado las acciones en circulación el importe de los derechos, 30 pesetas, junto con otros 50 enteros.

Los valores industriales se han mantenido dentro de una zona confusa en la que los altibajos, incluso dentro de un mismo corro, han sido la característica más acusada. La falta de definición de las posiciones ha sido la causa de esta irregularidad, a la que apenas ha escapado un solo sector. Dentro de este ambiente, se ha iniciado la contratación de Amper, cuyo primer cambio ha superado en 106 enteros la cotización media resultante en la subasta.

La contratación de pagarés del Tesoro en el mercado secundario continúa siendo importante, pues se mantiene por encima de los 25.000 millones de pesetas nominales diarias, al tiempo que los tipos de interés obtenidos para el pacto de recompra a una semana se sitúan entre el 8,5% y el 11% anual. Para las operaciones a tres meses la retribución anual sigue siendo del 8%.

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