El Banco de España reafirma la necesidad de integración en el Sistema Monetario Europeo

ENVIADO ESPECIAL, El gobernador del Banco de España, Mariano Rubio, volvió a señalar ayer la necesidad de que la economía española se integre en el Sistema Monetario Europeo como método para que la política económica desarrollada converja de manera más decidida con la de los países más rigurosos de la Comunidad Europea. A pesar de las limitaciones en algunos aspectos concretos, Mariano Rubio señaló, en su intervención de clausura en las XIII Jornadas de Mercado Monetario organizadas por Intermoney, que los países que habían dado mayores pasos tras la recuperación económica eran los que habían ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

ENVIADO ESPECIAL, El gobernador del Banco de España, Mariano Rubio, volvió a señalar ayer la necesidad de que la economía española se integre en el Sistema Monetario Europeo como método para que la política económica desarrollada converja de manera más decidida con la de los países más rigurosos de la Comunidad Europea. A pesar de las limitaciones en algunos aspectos concretos, Mariano Rubio señaló, en su intervención de clausura en las XIII Jornadas de Mercado Monetario organizadas por Intermoney, que los países que habían dado mayores pasos tras la recuperación económica eran los que habían dado prioridad para mantener una estabilidad del tipo de cambio de sus monedas frente a la divisa de la República Federal de Alemania.

La necesidad de integrarse en el sistema monetario, puesta de manifiesto en algunas ocasiones por el presidente del Gobierno, Felipe González, es la única vía, a juicio de Mariano Rubio, para llevar a cabo la adopción de unas medidas, necesarias en cualquier caso, con menores costes para todos. Entre los mayores logros conseguidos por los países de la Comunidad Europea a la hora de aceptar una subordinación, de sus políticas económicas nacionales a objetivos supranacionales, destacó Mariano Rubio el fuerte descenso de la tasa de inflación, que era del 10% en 1982, y se estima que acabará en un 3% en este año.El gobernador del Banco de España no ocultó que frente a este importante paso dado la situación en otros terrenos apenas si había variado y que el paro en la CE seguía siendo elevado y no había en la actualidad perspectivas de que fuera a mejorar. Lo mismo ha ocurrido con el volumen del déficit público, estancado por encima del 5% del producto interior bruto en la media de los países, aunque en este caso señaló que esa cifra escondía realidades muy distintas, como una corrección muy fuerte de los desequilibrios presupuestarios en la República Federal de Alemania, junto a problemas para el control del déficit en naciones como Italia.

En este mismo orden de cosas se había manifestado el pasado jueves Raimundo Ortega, director general del Banco de España, cuando señaló que "nuestra entrada en el sistema monetario supondría, desde luego, el más serio compromiso hasta ahora adoptado de combatir la inflación y podría tener unos efectos internos sobre la evolución de los salarios mucho más enérgicos que los logrados por la política de rentas o por la política monetaria". En una conferencia de prensa, previa a su intervención, el gobernador del Banco de España señaló que la decisión política sobre la integración o no en el sistema monetario correspondería al nuevo Gobierno surgido de las próximas elecciones. Este Gobierno tendrá que decidir sobre la oportunidad de la medida y, eventualmente, sobre los plazos para que se lleve a cabo. Mariano Rubio señaló que no creía que hubiera problemas técnicos para instrumentar la hipotética integración y que en España empezaba a ocurrir lo que hace ya tiempo se viene discutiendo en el Reino Unido, que no está integrado en el sistema pero que se lo está replanteando desde hace año y medio.

Coeficientes de inversión

Mariano Rubio no quiso concretar nada sobre la posible reducción de los coeficientes de inversión obligatoria que estudia en la actualidad el Ministerio de Economía, aunque señaló que había un deseo de hacerlo cuanto antes y que se trataba de elegir entre dos alternativas: proceder a una reducción inicial fuerte y mantener el calendario hasta 1990, o acelerar la entrada en funcionamiento de las reducciones escalonadas ya previstas en el desarrollo de la ley del coeficiente de inversión.Aunque tampoco lo quiso cuantificar, el gobernador del Banco de España auguró una baja de los tipos de interés en los próximos meses en la medida en que se confirmen las expectativas de reducción de la tasa de inflación.

La plena adhesión de España a la CE plantea a la banca española, en opinión de Mariano Rubio, dos retos a los que tiene que hacer frente. El primero de ellos es la adecuación de sus costes de transformación a los de la competencia europea, lo que no le preocupa en exceso al gobernador del Banco de España, y el segundo es "la necesidad de que la banca cree el soporte financiero de las empresas que sea capaz de generar empleo y minimizar los costes de la plena integración".

Por otro lado, Juan José Toribio, secretario general de la Caja de Pensiones, señaló que la estrategia de los bancos españoles, al menos de las grandes entidades, tras la adhesión de nuestro país a la CE, no exige en sí misma grandes novedades en cuanto a la definición del negocio bancario, informa Europa Press. Por el momento tampoco la banca española gozará de grandes oportunidades de expansión hacia el mercado europeo, aunque en el seno de la Comunidad se advierte un nuevo plan para impulsar hasta sus últimas consecuencias el proyecto inicial de un mercado auténticamente común, que en el orden financiero puede llevar a cambios legislativos importantes. Será necesario, dijo, que dichos cambios se produzcan antes de proceder a redefiniciones auténticas del negocio bancario.

Archivado En