Los hombres de Cory

Durante la campaña electoral, el presidente Ferdinand Marcos acusaba a Cory Aquino de que, en caso de llegar al poder, nunca podría gobernar porque tiene detrás una "banda de 50 asesores" que se disputarán las decisiones.Cory Aquino, que en más de una ocasión ha dejado plantado a su equipo a fin de mostrar su autoridad, nunca habla de nombres cuando se le pregunta por cuál sería su Gabinete si llega el relevo del poder. Niega tener un Gabinete fantasma, excepto en el caso del vicepresidente, Salvador Laurel, banquero, ex senador y, prácticamente, controlador del aparato del grupo po...

Durante la campaña electoral, el presidente Ferdinand Marcos acusaba a Cory Aquino de que, en caso de llegar al poder, nunca podría gobernar porque tiene detrás una "banda de 50 asesores" que se disputarán las decisiones.Cory Aquino, que en más de una ocasión ha dejado plantado a su equipo a fin de mostrar su autoridad, nunca habla de nombres cuando se le pregunta por cuál sería su Gabinete si llega el relevo del poder. Niega tener un Gabinete fantasma, excepto en el caso del vicepresidente, Salvador Laurel, banquero, ex senador y, prácticamente, controlador del aparato del grupo político Unido y de la gran mayoría de los parlamentarios de la oposición en el Parlamento filipino.

En Manila se habla mucho, sin embargo, de varios nombres importantes a la sombra del tándem Aquino-Laurel. En particular, de Jaime Ongpin, presidente de una de las sociedades mineras más importantes del sureste asiático, graduado en la universidad de Harvard y considerado como uno de los cerebros detrás de la candidatura de Aquino y su posible programa de Gobierno. Ongpin fue uno de los primeros en denunciar públicamente que el régimen de Marcos, basado en las prebendas económicas para los amiguetes, acabaría destruyendo el sistema económico filipino, predicción que se está cumpliendo.

Emanuel Soriano, antiguo presidente de la universidad de Filipinas, es otro de los nombres que suenan entre los partidarios influyentes del equipo Aquino. El hombre de negocios Ramón del Rosario -cuyo padre dimitió hace unos días como embajador de Filipinas en la República Federal de Alemania, por oposición al régimen de Marcos- es otro personaje en el discreto equipo de Cory Aquino.

Joker Arroyo, un abogado defensor de los derechos humanos; Cecilia Muñoz Palma, ex juez del Tribunal Supremo, o el economista Bernardo Villegas, formado también en Harvard, destacan-igualmente entre los nombres que pueden surgir en la escena política filipina, para formar un equipo relativamente joven, en la raya de los 50 años de edad.