El Gobierno vasco reitera su deseo de diálogo y negociación

El Gobierno vasco reiteró ayer su voluntad de "convocar las reuniones que sean necesarias al objeto de encaminar los problemas de Euskadi por la vía del diálogo y la negociación", y consideró que la explicación ofrecida por la ejecutiva socialista respecto al documento del PSOE vizcaíno sobre la política educativa del Ejecutivo de Vitoria, demuestra que "se trata de un problema interno del socialismo vasco".La actitud de los socialistas vascos desencadenó la reacción del Gobierno de Vitoria, cuyo portavoz había amenazado el miércoles con congelar la comisión de seguimiento del pacto de legisla...

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El Gobierno vasco reiteró ayer su voluntad de "convocar las reuniones que sean necesarias al objeto de encaminar los problemas de Euskadi por la vía del diálogo y la negociación", y consideró que la explicación ofrecida por la ejecutiva socialista respecto al documento del PSOE vizcaíno sobre la política educativa del Ejecutivo de Vitoria, demuestra que "se trata de un problema interno del socialismo vasco".La actitud de los socialistas vascos desencadenó la reacción del Gobierno de Vitoria, cuyo portavoz había amenazado el miércoles con congelar la comisión de seguimiento del pacto de legislatura. No obstante, el Gobierno vasco, decidió ayer plegar velas y, tomando pie en la precisión socialista de que se trataba de un documento de la agrupación de Vizcaya, y no de la ejecutiva de Euskadi, reiteró su disposición a retomar el diálogo.

Cincuenta mil ejemplares del documento, que lleva por título Carta de la educación, fueron distribuidos en Vizcaya en diciembre, sin que en su momento suscitasen reacción alguna por parte del PNV o el Gobierno vasco.

Entre las acusaciones recogidas en el texto figuran las siguientes: "El Gobierno vasco hace del euskera una bandera nacionalista excluyente y discrimina a los castellano-parlantes, favoreciendo la confrontación" y "generaliza por decreto la aplicación del modelo B (enseñanza bilingüe), sin criterios evaluadores".

El documento fue redactado y discutido por el PSOE de Vizcaya, cuyo secretario general, Ricardo García Damborenea, mantiene desde hace años diferencias con la ejecutiva socialista de Euskadi, que encabeza José María Benegas. Sin embargo, no es en el campo de la política educativa y, más precisamente, de la crítica a la política educativa nacionalista, donde esas diferencias son más ostensibles. Concretamente, es probable que la ejecutiva que encabeza Benegas hubiera empleado un lenguaje menos sumario, pero, a la vez, es casi seguro que el contenido de cualquier documento suyo sobre la política educativa del Gobierno hubiera sido muy similar.

De todas formas, el Ejecutivo de Vitoria considera confirmado que lo que hay es "un problema de los socialistas" para advertir a éstos, en un comunicado difundido ayer, que espera que en adelante "sean más prudentes a la hora de juzgar y exigir responsabilidades de los posibles problemas que puedan existir en los demás".

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