Cartas al director

Cardiologos famosos

Me veo obligado a escribirle en defensa del rigor informativo, cuando, al leer en la última página de su diario del 11 de diciembre el artículo sobre el cardiólogo ruso Evgeni Chazov, y refiriéndose al ataque cardiaco que sufrió el informador de la misma nacionalidad Lev Novikov, dice textualmente, ante mi asombro: "Los dos mejores y más famosos cardiólogos del mundo corrieron a su lado y sobre las alfombras de la sala empezaron a practicarle las más modernas técnicas de reanimación".Por mi condición de médico relacionado con la cardiología puedo decirle:

1. La cardiología no es ...

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Me veo obligado a escribirle en defensa del rigor informativo, cuando, al leer en la última página de su diario del 11 de diciembre el artículo sobre el cardiólogo ruso Evgeni Chazov, y refiriéndose al ataque cardiaco que sufrió el informador de la misma nacionalidad Lev Novikov, dice textualmente, ante mi asombro: "Los dos mejores y más famosos cardiólogos del mundo corrieron a su lado y sobre las alfombras de la sala empezaron a practicarle las más modernas técnicas de reanimación".Por mi condición de médico relacionado con la cardiología puedo decirle:

1. La cardiología no es una actividad tan limitada que permita que sólo dos personalidades, científicamente hablando, puedan tener una calidad claramente superior al resto, especialmente si nos referimos a Evgeni Chazov, cuyo nombre no dice nada en la cardiología de alto nivel, a diferencia del tema Sajarov, en el que sí parece tener mucho que decir. Sería aburrido citarle todos los nombres de los cardiólogos que constituyen la elite de la cardiología mundial.

2. Evidentemente, puede que durante estos días sean los más famosos, pero en ningún caso, como el artículo insinúa, por méritos estrictamente profesionales, ni mucho menos entre los profesionales que estamos relacionados de un modo u otro con la cardiología.

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3. Dificilmente le pudieron ser aplicadas a este informador las más modernas técnicas de reanimación en una sala de prensa. Más bien cabría decir que le fueron aplicadas las más básicas técnicas de reanimación, manos y boca, que son de las que dispone cualquier persona en cualquier momento.

Me pregunto, si en una información no trascendente, como es ésta, se demuestra tan poco rigor informativo, ¿qué pasará con los temas de auténtica importancia, con los que se puede manejar la opinión de todo un pueblo ... ?- Médico. .

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