COMUNIDAD VALENCIANA

Sorpresa por la celeridad con que Guerra y Lerma firmarán el final de las transferencias

El vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, y el presidente de la Generalitat valenciana, Joan Lerma, junto con el ministro de Administración Territorial, Félix Pons, firmarán el próximo día 4 de octubre, en Valencia, el documento formal de culminación del proceso de transferencias entre la Administración central y la Generalitat. Este acto oficial se va a producir cuando todavía están sin transferir y por cerrar capítulos tan importantes como el Instituto Nacional de la Salud (Insalud) y Ferrocarriles de Vía Estrecha (FEVE).

Tan precipitado cierre de un proceso de transferencias qu...

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El vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, y el presidente de la Generalitat valenciana, Joan Lerma, junto con el ministro de Administración Territorial, Félix Pons, firmarán el próximo día 4 de octubre, en Valencia, el documento formal de culminación del proceso de transferencias entre la Administración central y la Generalitat. Este acto oficial se va a producir cuando todavía están sin transferir y por cerrar capítulos tan importantes como el Instituto Nacional de la Salud (Insalud) y Ferrocarriles de Vía Estrecha (FEVE).

Tan precipitado cierre de un proceso de transferencias que aún está por concluir ha causado sorpresa en Valencia, pues no se recuerdan casos similares en otras comunidades autónomas. Una posible explicación estaría en la reciente remodelación del Consell -órgano ejecutivo de la Generalitat-, realizada por Lerma en julio y que el propio presidente vinculó a la conclusión del proceso de transferencias.En realidad, la remodelación tuvo más bien un carácter político, especialmente por lo que se refiere a la destitución del antiguo conseller de Gobernación, Felipe Guardiola, y al traslado de Rafael Blasco, antiguo conseller de Presidencia, a la Consejería de Obras Públicas. Lerma eliminó de su Gobierno a Guardiola, que en los últimos tiempos se había destacado por mantener posturas contrarias a las del presidente en el seno del Partido Socialista del País Valenciano (PSPV-PSOE), del que Lerma es secretario general.

El presidente, en sus declaraciones públicas, hizo aparecer la remodelación como una consecuencia de la conclusión del proceso de transferencias, y por ello hizo que la comisión mixta de transferencias entre la Generalitat y la Administración central cerrase sobre el papel el proceso el pasado 30 de julio en Madrid, pese a que el valor económico de lo que queda por transferir -y negociar- es ligeramente inferior al de la totalidad de las competencias con que ya cuenta la Generalitat.

Los presupuestos globales de la Generalitat para el presente año ascienden a 132.000 millones de pesetas. Si se les suma el valor de los capítulos que quedan por transferir -Insalud, IRYDA, universidades y Feve-, el total puede suponer unos 250.000 millones de pesetas. Especialmente delicado es el del Insalud, pues se trata de un capítulo en torno a los 100.000 millones al año, en el que errores en porcentajes muy pequeños pueden suponer cantidades elevadas. Los cálculos más optimistas de la Generalitat dan como fecha real de conclusión del proceso de transferencias el 1 de enero de 1986.

Por lo que respecta a Feve, se están realizando obras en Valencia para nuevos trazados subterráneos y conexión con la red de Renfe que costarán 4.000 millones de pesetas.

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