Castro insiste en que América Latina no pague la deuda
El Encuentro sobre deuda exterior de América Latina y el Caribe, que ha congregado en La Habana durante cinco días a 1.200 personalidades de 17 países, terminó con una llamada a no pagar los 60 billones de pesetas -360.000 millones de dólares- invertidos en la zona por la banca internacional. "La deuda es un cáncer que requiere operación quirúrgica. Todo lo que no sea quirúrgico no sirve", afirmó el líder cubano, quien añadió: "Es impagable y no nos la van a cobrar con armas nucleares".La conferencia, aun cuando obtuvo consenso sobre la necesidad de, unión latinoamericana, concluyó sin ...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
El Encuentro sobre deuda exterior de América Latina y el Caribe, que ha congregado en La Habana durante cinco días a 1.200 personalidades de 17 países, terminó con una llamada a no pagar los 60 billones de pesetas -360.000 millones de dólares- invertidos en la zona por la banca internacional. "La deuda es un cáncer que requiere operación quirúrgica. Todo lo que no sea quirúrgico no sirve", afirmó el líder cubano, quien añadió: "Es impagable y no nos la van a cobrar con armas nucleares".La conferencia, aun cuando obtuvo consenso sobre la necesidad de, unión latinoamericana, concluyó sin acuerdos ni conclusiones, como estaba previsto. El propio Castro, quien habló durante dos horas y media, recordó que "el objetivo del encuentro no era hacer un documento, sino crear conciencia sobre el problema".
El líder revolucionario vaticinó que "se va a ampliar el abisino" entre los países desarrollados y América Latina, al encarecerse los productos industrializados que venden los primeros y abaratarse las materias primas que suministran los otros.
El abanderamiento por Castro de las posiciones radicales quedó patente al indicar que "no resuelve el problema" la postura expresada por el nuevo presidente de Perú, Alan García: destinar el 10% anual de las exportaciones para atender deudas. México, por ejemplo, dedica ya el 82% de sus ventas de mercancías. Pero, al igual que Brasil y otros países menores, mantiene su intención de negociar con los acreedores.
Página 31