El secretario general de UGT afirma que se presionó sobre los diputados socialistas

El secretario general de UGT, Nicolás Redondo, afirmó ayer que si la central sindical que dirige hubiera presionado, el resultado de la votación de ayer sobre reforma de las pensiones habría sido diferente. Añadió que, en cambio, los diputados del Grupo Socialista sí habían recibido presiones para impedir que se rompiera la disciplina de voto. "Nosotros desde UGT no hemos querido hacer lo mismo, aunque si lo hubiéramos hecho otra cosa habría sido; no hemos deseado mandar circulares ni cosas por el estilo para no poner todo patas arriba", reconoció Redondo. El presidente del Gobierno, Felipe Go...

El secretario general de UGT, Nicolás Redondo, afirmó ayer que si la central sindical que dirige hubiera presionado, el resultado de la votación de ayer sobre reforma de las pensiones habría sido diferente. Añadió que, en cambio, los diputados del Grupo Socialista sí habían recibido presiones para impedir que se rompiera la disciplina de voto. "Nosotros desde UGT no hemos querido hacer lo mismo, aunque si lo hubiéramos hecho otra cosa habría sido; no hemos deseado mandar circulares ni cosas por el estilo para no poner todo patas arriba", reconoció Redondo. El presidente del Gobierno, Felipe González, no quiso realizar declaraciones sobre el voto del secretario de UGT. "No tengo nada que aclarar, ustedes han visto la votación", dijo González.Redondo no cree que un solo grupo -el socialista- pueda estar en posesión de toda la verdad. "Todo el movimiento sindical está en contra del proyecto, gran parte del movimiento obrero, la oposición parlamentaria, los empresarios, todos menos uno que no creo yo que estén en posesión de la verdad absoluta", decía Redondo. "El proyecto es negativo y eso nos hará ir a la manifestación del día 4 con más entusiasmo, a ella irán cientos de miles de personas, incluso millones", auguraba el secretario general de UGT. "Por primera vez he roto la disciplina del partido por imperativos ideológicos, políticos y éticos", afirmó con vehemencia. Redondo repitió que con esta ley se perjudica a la clase trabajadora.

La ausencia en el momento de la votación de Ricardo García Damborenea, secretario general del Partido Socialista de Vizcaya, levantó murmullos. "No puedo volver a Vizcaya diciendo que he dejado solo a Nicolás Redondo", manifestó Damborenea a este periódico. "No puedo votar en contra del partido pero tampoco en contra de UGT, por eso prefiero estar ausente", se justificó.

Los pasillos del Congreso registraron ayer una inusual concurrencia. Circularon versiones interesadas de que la dirección del Grupo Socialista iba a aceptar numerosas enmiendas al proyecto de ley que presuntamente recogerían las tesis de UGT. Nada más lejos de la realidad y así le consta a Redondo. "El proyecto no va a sufrir variaciones sustanciales, lo que nos reafirma aún más en la manifestación del día 4".

Aprobada la ley del aborto

Por otra parte el Congreso votó ayer la totalidad de ley orgánica que despenaliza el aborto en tres supuestos, con 195 votos a favor, 80 negativos y 14 abstenciones. A los votos socialistas se unieron los del Grupo Mixto y cinco de Minoría Catalana, con la oposición de populares y centristas y la abstención de los nacionalistas vascos.