Las cenizas de Indira Gandhi, esparcidas sobre las montañas del Himalaya

ENVIADO ESPECIALLas últimas cenizas de Indira Gandhi fueron esparcidas ayer sobre la cordillera del Himalaya, en una ritual y solemne ceremonia que pone punto final a los funerales y a los 12 días de duelo oficial proclamados en la India tras su asesinato. Su hijo y primer ministro, Rajiv Gandhi, siguió los actos desde un avión militar de transporte.

Las cenizas de Indira Gandhi, que durante los últimos días habían viajado en urnas a los diferentes Estados para recibir el homenaje del pueblo indio, fueron devueltas el sábado a Nueva Delhi en aviones especiales. En Teen Murti, memori...

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ENVIADO ESPECIALLas últimas cenizas de Indira Gandhi fueron esparcidas ayer sobre la cordillera del Himalaya, en una ritual y solemne ceremonia que pone punto final a los funerales y a los 12 días de duelo oficial proclamados en la India tras su asesinato. Su hijo y primer ministro, Rajiv Gandhi, siguió los actos desde un avión militar de transporte.

Las cenizas de Indira Gandhi, que durante los últimos días habían viajado en urnas a los diferentes Estados para recibir el homenaje del pueblo indio, fueron devueltas el sábado a Nueva Delhi en aviones especiales. En Teen Murti, memorial erigido en la capital india en honor de su padre, Jawaharlal Nehru, se reunieron todas las cenizas en tres urnas de cobre, que fueron expuestas al público durante algunas horas.

Poco antes de las siete de la mafiana de ayer, bajo escolta de los tres Ejércitos, las urnas fueron llevadas en una espectacular comitiva hasta la zona militar del aeropuerto de Palham, en Delhi. Las urnas con las cenizas de la asesinada recibieron honores militares antes de abandonar Teen Murti.

El armón de artillería que transportaba los restos de Indira Gandhi llegó a Palham poco después de las 7.30 horas. Las urnas ante las que presentaban armas soldados de aviación fueron allí depositadas en un helicóptero.que despegó inmediatamente hacia la base de la fuerza aérea de Hindon, junto a la frontera nepalí.

Las cenizas de la estadista, a bordo ya de un avión de las fuerzas aéreas indias, fueron esparcidas poco después, mientras el aparato sobrevolaba el techo del mundo. El presidente indio, Zail Singh; los miembros del Gobierno y los líderes del Partido del Congreso (1) estabanjunto a Rajiv Gandhi en el avión militar de transporte que acompañaba al que portaba los restos de Indira Gandhi.

El esclarecimiento del asesinato, ocurrido el 31 de octubre, parece ir para largo. Hasta ayer no fueron conferidos plenos poderes al ex director general de las Fuerzas de Seguridad indias, Anand Ram, para elegir al equipo policial que, bajo su dirección, ha de elaborar la versión final del magnicidio.

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En los últimos días se ha producido un peloteo por la responsabilidad investigadora sobre el asesinato de Indira Gandhi. No sólo la policía del Nueva Delhi, sino la ,Oficina Central de Investigación, un organismo de alcance nacional similar al FBI norteamericano, han recibido competencias para obtener susPropias conclusiones.

Satwant Singh, de 22 años, uno de los dos escoltas de religión sij que disparó contra Indira Gandhi, será dado de alta en los próximos días. Ha sido detenido, entre tanto, un militar retirado que recomendó a Satwant para el puesto que ocupó en la policía de Nueva Delhi, antes de ser asignado a la custodia de la primera ministra.

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