ARAGÓN

Pilotos militares ofrecen una comida a vecinos de un pueblo donde se estrelló un Phantom

Los apenas 130 habitantes de Peralejos (Teruel) vivieron ayer una jornada de confraternización con mandos y oficiales de la base aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid), quienes les agradecieron la iniciativa de levantar un monumento en memoria de dos capitanes que perdieron la vida el pasado 4 de mayo al estrellarse el Phantom F-4 que pilotaban en el citado término municipal. Asistieron a los actos cerca de 30 pilotos de la base de Torrejón, en la que estaban destinados los capitanes José Manuel Hernández y Gonzalo Gracia, muertos en el accidente.

Tras la misa en memoria de los dos mil...

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Los apenas 130 habitantes de Peralejos (Teruel) vivieron ayer una jornada de confraternización con mandos y oficiales de la base aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid), quienes les agradecieron la iniciativa de levantar un monumento en memoria de dos capitanes que perdieron la vida el pasado 4 de mayo al estrellarse el Phantom F-4 que pilotaban en el citado término municipal. Asistieron a los actos cerca de 30 pilotos de la base de Torrejón, en la que estaban destinados los capitanes José Manuel Hernández y Gonzalo Gracia, muertos en el accidente.

Tras la misa en memoria de los dos militares, oficiada por el capellán del Ala 12 de la base de Torrejón y por el párroco del pueblo, tuvo lugar una comida de hermandad -no se pudo celebrar en la plaza del pueblo, como estaba previsto, por mal tiempo-, a la que asistieron unas 200 personas, y que fue traída desde Madrid por los militares.

La idea de levantar un monumento en memoria de los dos militares muertos surgió del alcalde de la localidad, quien lo comentó con un comandante que fue a Peralejos. Ha costado 40.000 pesetas, que pagarán a partes iguales el Ejército del Aire y el Ayuntamiento de Peralejos. Se ha levantado en el lugar donde cayó el Phantom un monolito de tres metros y medio de altura, donde se ha colocado una placa con el anagrama del Ala 12 (una cara de gato).

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