El Gobierno podrá expulsar de las Fuerzas Armadas al militar que se manifieste contra la Constitución o el Rey

El Gobierno, en Consejo de Ministros, podrá expulsar del Ejército al militar que haya demostrado "con reiteración, pública y manifiestamente, una actitud contraria a la Constitución o al Rey", según establece el nuevo anteproyecto de ley orgánica de Régimen Disciplinario de las Fuerzas Armadas (FAS), que ha ultimado el Ministerio de Defensa, del que informó ayer la agencia Europa Press. Otra novedad del anteproyecto es la supresión de toda referencia a la homosexualidad.El anteproyecto incluye en el título denominado "del expediente gubernativo" unas sanciones disciplinarias extraordinarias po...

El Gobierno, en Consejo de Ministros, podrá expulsar del Ejército al militar que haya demostrado "con reiteración, pública y manifiestamente, una actitud contraria a la Constitución o al Rey", según establece el nuevo anteproyecto de ley orgánica de Régimen Disciplinario de las Fuerzas Armadas (FAS), que ha ultimado el Ministerio de Defensa, del que informó ayer la agencia Europa Press. Otra novedad del anteproyecto es la supresión de toda referencia a la homosexualidad.El anteproyecto incluye en el título denominado "del expediente gubernativo" unas sanciones disciplinarias extraordinarias por acumular notas desfavorables sobre su cualificación personal, por mala conducta habitual, por actitudes contrarias a la Constitución, al Rey, al honor militar y a la disciplina. Las sanciones en estos casos son la pérdida de puesto en el escalafón militar, la suspensión de empleo entre tres meses y un año, la rescisión de compromiso y la separación del servicio.

Esta última supondrá la expulsión del Ejército, y, sólo podrá ser impuesta por Consejo de Ministros. La pérdida de puestos en el escalafón y la suspensión de empleo, por decisión del ministro de Defensa. La rescisión de compromiso, por el ministro, por los jefes de Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), por los jefes de Estado Mayores de los Ejércitos (JEMES), por el subsecretario de la Defensa y por el director general de la Guardia Civil.

El precedente- más significado de injurias al Rey lo protagonizó en mayo de 1981 el capitán Juan Milans del Bosch, quien en un local público calificó al Rey de "cerdo e inútil".

El nuevo régimen disciplinario introduce 27 faltas graves, entre las que destacan estar afiliado a alguna organización política o, sindical, asistir con uniforme a una manifestación o reunión política, excederse en las facultades propias, hacer reclamaciones contrarias a la disciplina a través de los medios de comunicación, embriagarse o consumir drogas. El trato degradante a un inferior pasa a ser considerado como delito.