La reconversión industrial está causando "cansancio y hastío", según Abril Martorell

Las discrepancias entre CC OO y UGT al analizar el proceso de reconversión industrial -si bien ninguno de los dos sindicatos negó la necesidad de acometer ésta-, marcaron el debate celebrado ayer en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo en santander. El ex vicepresidente del gocierno y actial presidente de Unión Naval de Levante, Fernando Abril Martorell, precisó que la reconversión estaba causando «cansancio y hastío" y que, al margen de definiciones técnicas o actitudes ambiguas, el éxito de la reconversión industrial en España pasaba por el establecimiento de metas creíbles, en defin...

Las discrepancias entre CC OO y UGT al analizar el proceso de reconversión industrial -si bien ninguno de los dos sindicatos negó la necesidad de acometer ésta-, marcaron el debate celebrado ayer en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo en santander. El ex vicepresidente del gocierno y actial presidente de Unión Naval de Levante, Fernando Abril Martorell, precisó que la reconversión estaba causando «cansancio y hastío" y que, al margen de definiciones técnicas o actitudes ambiguas, el éxito de la reconversión industrial en España pasaba por el establecimiento de metas creíbles, en definitiva, por "hacer mejor y mucho más barato lo que sabemos hacer".

Abril Martorell, que manifestó en su exposición inicial la impresión de que la reconversión industrial está produciendo "cansancio y hastío", veía parcialmente confirmada esta apreciación tras las intervenciones de los otros dos ponentes, el secretario general de la federación del metal de CC OO Juan Ignacio Marín, y el secretario confederal de acción sindical de UGT, José Luis Corcuera. Ambos dirigentes sindicales utilizaron una gran parte de sus intervenciones en el seminario que organiza la Agrupación de Periodistas de Información Económica (APIE), en reprocharse, más o menos veladamente, las actuaciones concretas llevadas a cabo en el proceso de reconversión.Para el presidente de Unión Naval de Levante, la reconversión industrial debe considerarse como un proceso constante no sujeto, únicamente, a decretos puntuales. Y precisó que dicho proceso en los sectores siderúrgico y naval no podrá llevarse a cabo en un plazo inferior a cinco años. Aunque reconoció las dificultades existentes para racionalizar la actividad en dichos sectores, Abril Martorell apuntó que los costes del sector naval en los pequeños y medianos astilleros son competitivos con relación a Europa. El desconocimiento por parte de las empresas privadas del sector naval del papel que las centrales sindicales les asignan en la reconversión y especialmente en el caso de CC OO, fue otro de los temas planteados por el, ex vicepresidente del Gobierno.

Para Marín, la tendencia de la Administración pública -no representada en la mesa al no acudir el vicepresidente del INI, Julián García Valverde- a presentar los excedentes de plantillas como el "único culpable" de la crisis de los sectores industriales sujetos de la reconversión, sería la que determina la actitud defensiva de los trabajadores y la crispación social. En opinión del dirigente de CC OO, el acuerdo alcanzado en Altos Hornos de Sagunto es el ejemplo a seguir en el proceso de reconversión del resto de las empresas.

Corcuera, que precisó que el acuerdo de Sagunto podía haber sido obtenido un año antes, sería el primero en criticar veladamente la actuación sindical de CC OO, señalando que si bien existe acuerdo para que la reconversión se lleve a cabo, "cuando se aplica y se ven los resultados algunos hablan de forma ambivalente".

El dirigente ugetista calificó de "conservadores absolutos" a quienes se oponen a la reconversión, añadiendo que quien está en contra de la misma, "está en contra del empleo".