Moderadas críticas al mensaje en el mundo empresarial y político y rechazo frontal por Comisiones Obreras

Las primeras reacciones al mensaje del presidente del Gobierno reflejan en términos generales una aceptación crítica en el empresariado, un desacuerdo táctico de los partidos políticos -todos habrían preferido el Parlamento como marco del discurso- y una respuesta desigual en el mundo sindical: para Comisiones Obreras, el mensaje es una tomadura de pelo, mientras UGT se muestra de acuerdo con su contenido.

Carlos Ferrer, actual presidente de la patronal CEOE, declaró que comparte 9as palabras utilizadas por Felipe González en el terna de modernización de la industria, de la revolución t...

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Las primeras reacciones al mensaje del presidente del Gobierno reflejan en términos generales una aceptación crítica en el empresariado, un desacuerdo táctico de los partidos políticos -todos habrían preferido el Parlamento como marco del discurso- y una respuesta desigual en el mundo sindical: para Comisiones Obreras, el mensaje es una tomadura de pelo, mientras UGT se muestra de acuerdo con su contenido.

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Carlos Ferrer, actual presidente de la patronal CEOE, declaró que comparte 9as palabras utilizadas por Felipe González en el terna de modernización de la industria, de la revolución tecnológica necesaria para salir de la crisis, y me congratulo de que empiece a aplicarlas al hablar de la economía española, pero no estoy de acuerdo con, las medidas tomadas por el Gobierno para conseguir esa modernización. Las medidas que propugna el Gobierno nos llevan a un mayor intervencionismo, un creciente gasto público y a una rigidez administrativa que impide que la reconversión se lleve a cabo de forma adecuada".Para José María Cuevas, secretario general de CEOE y candidato oficial a la presidencia, la intervención del presidente del Gobierno ha sido "una nueva lección de pedagogía digna de agradecer". En opinión de Cuevas no es este tipo de explicación lo que necesita en estos momentos el país, porque ya se ha dicho lo mismo en repetidas ocasiones, sino análisis más profundos de lo que está ocurriendo.

En opinión de Santiago Foncillas, presidente del Círculo de Empresarios y hasta hace poco tiempo presidente de Westinghouse, Felipe González ha estado muy bien aconsejado y ha cumplido los dos objetivos políticos: respaldo a la política de su equipo económico y advertencia a las centrales sindicales de la decisión de llevar a cabo la necesaria reconversión.

Julián Ariza, de CC OO, manifestó que la intervención del presidente del Gobierno no ha sido seria -"nos ha tomado el pelo"- porque "frente a las protestas obreras y sociales lo que se nos ha venido a decir es que se va a continuar en la línea que ha provocado dichas protestas". Para Ariza, la intervención del presidente "se ha dirigido a la derecha económica para tranquilizarla y asegurarle que se va a mantener la línea seguida hasta ahora".

José Luis Corcuera, secretario de Acción Sindical de UGT, declaró que participa de las ideas fundamentales expuestas por el presidente del Gobierno. "La reconversión debe ir acompañada de una política rigurosa de encontrar alternativas industriales que aseguren empleos alternativos. El mensaje de González de solidaridad y diálogo es la única receta para superar la crisis".

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Según José Luis Cerón, empresario del sector de autopistas vinculado al Banco Central y presidente de la Comisión de Economía de CEOE, "el presidente ha vuelto a demostrar que es un excelente comunicador y didáctico". Pero a su juicio es "inquietante" que haya salido cuando llevamos casi un año con medidas de reconversión desde que se publicó el libro blanco y salieron los primeros planes.

Para Carlos Cortes, secretario general del Círculo de Empresarios, la intervención, en conjunto, ha merecido un notable. Pero opina que se ha gastado demasiada artillería, pues se anunció que hablaría de política económica y se ha centrado en la reconversión.

Jordi Mercader, vicepresidente del Círculo de Economía, declaró que el discurso le pareció una manifestación de buena voluntad y una óptima reafirmación de la política económica del Gobierno. De todos modos cree necesario que el pacto entre las fuerzas económicas del país, del que ha hablado el presidente del Gobierno, se reafirme.

Alfredo Molinas, presidente de Fomento del Trabajo Nacional, la patronal catalana, afirmó que el discurso ha sido una nueva lección de pedagogía, pero ¿qué política económica quiere llevar a la práctica el Gobierno? ¿La realizada el pasado año, en que no se hizo nada, o la de reconversión, en la que ya se ha cedido de tal forma que no es rentable? Siempre hemos deseado el diálogo, pero es preciso que el Estado arregle sus empresas, que son las que tienen más pérdidas".

Deseo de debates

Por lo que respecta a los medios políticos, Miquel Roca lamenta "que estos discursos se hagan en Televisión y no en el Parlamento, pero lo entiendo, ya que sus argumentos no hubieran podido aguantar un debate. Me ha parecido un discurso vacío, confuso y contradictorio. Ha hablado de objetivos, pero no los ha mencionado. Ha dicho que su Gobierno trabaja para los más desfavorecidos y, en cambio, éstos son los que están sufriendo más su política económica".El presidente de Afianza Popular y líder de la oposición conservadora, Manuel Fraga, también lamentó que la intervención de Felipe González no se hubiese producido en el Parlamento y anunció que en el futuro, y ya que se anuncian nuevas intervenciones del jefe del Gobierno, pedirán un espacio igual en TVE. "Mantener la política económica me parece razonable, pero no basta con emplear la firmeza; también hay que convencer, dar argumentos, lo que no está ocurriendo ahora, precisamente".

La dirección del Partido Demócrata Popular emitió una nota señalando que esta intervención "llega tarde a los españoles, como lo reconoció el propio González".

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