La Unión Soviética, interesada en la fabricación de un hidroala en España
La Unión Soviética ha expresado en los últimos meses su interés para fabricar en España un hidroala de eminente aplicación comercial, aunque podría ser acoplada para utilización militar. Miembros de una empresa soviética dedicada a la exportación han mantenido ya en Madrid diversos contactos con altos cargos de la empresa española Construnaves, para conocer el posible interés de algún astillero español en el proyecto. Hasta el momento, no se ha producido ninguna respuesta positiva.Los representantes soviéticos ofrecen la posibilidad de que en España se fabriquen los motores y en la URSS se con...
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La Unión Soviética ha expresado en los últimos meses su interés para fabricar en España un hidroala de eminente aplicación comercial, aunque podría ser acoplada para utilización militar. Miembros de una empresa soviética dedicada a la exportación han mantenido ya en Madrid diversos contactos con altos cargos de la empresa española Construnaves, para conocer el posible interés de algún astillero español en el proyecto. Hasta el momento, no se ha producido ninguna respuesta positiva.Los representantes soviéticos ofrecen la posibilidad de que en España se fabriquen los motores y en la URSS se construya la estructura de la nave. En el caso de llegar a un acuerdo, la nave podría ser exportada desde España a países interesados en su compra.
La nave, de la que existen varios modelos, tiene una capacidad mínima para 50 pasajeros. En la parte baja del casco tiene una larga quilla vertical y alas horizontales. Una vez que el barco alcanza una alta velocidad, la nave despega y sólo tiene contacto con el agua a través de la quilla vertical. Debido a este sistema de desplazamiento, el hidroala sólo puede emplearse en aguas interiores (lagos y ríos) en mar tranquila.
En Estados Unidos se fabrican también naves de estas características, que son utilizadas tanto para fines comerciales como militares. Algunas de estas naves fueron compradas por España y son empleadas preferentemente para comunicaciones entre las islas Canarias. Si llegasen a fabricarse en España hidroalas de origen soviético y fueran empleados con fines militares, se trataría de la primera colaboración militar hispano-soviética.