La OUA gestiona la eliminación de obstáculos para que se celebre el referéndum sobre el Sáhara

El ministro de Asuntos Exteriores etíope, Goshu Wolde, y el secretario general interino de la OUA, Peter Onu, que ayer abandonaron Rabat para trasladarse a Argel, intentaron con las autoridades marroquíes, como lo harán con las argelinas, eliminar los obstáculos que por ahora se oponen a la celebración de un referéndum de autodeterminación en el Sáhara

Wolde y Peter Onu declararon a su llegada al aeropuerto de Casablanca que el objetivo de esta misión, que llevan a cabo por encargo del jefe del Estado etíope y presidente en ejercicio de la OUA, Mengistu Haile Mariam, "es lograr que se c...

El ministro de Asuntos Exteriores etíope, Goshu Wolde, y el secretario general interino de la OUA, Peter Onu, que ayer abandonaron Rabat para trasladarse a Argel, intentaron con las autoridades marroquíes, como lo harán con las argelinas, eliminar los obstáculos que por ahora se oponen a la celebración de un referéndum de autodeterminación en el Sáhara

Wolde y Peter Onu declararon a su llegada al aeropuerto de Casablanca que el objetivo de esta misión, que llevan a cabo por encargo del jefe del Estado etíope y presidente en ejercicio de la OUA, Mengistu Haile Mariam, "es lograr que se cumplan las resoluciones de la OUA y que se ponga fin, de una vez por todas, al conflicto del Sáhara occidental".Las resoluciones a que se refería el ministro etíope son las de la cumbre de Addis Abeba de este año, que reclama negociaciones directas entre Marruecos y el Polisario, y las de la cumbre de la OUA de Nairobi de 1981, que disponía la celebración de un referéndum de autodeterminación en el Sáhara y establecía las modalidades para llevarlo a cabo.

En una nota enviada por Hassan II a los jefes de Estado africanos unos días antes de esta visita, afirmaba que, si bien la primera resolución relativa a la necesidad de un referéndum en el Sáhara la considera vinculante, no ocurre lo mismo con la de Addis Abeba, que sólo exhorta a las partes a celebrar negociaciones directas.

"A pesar de su convicción íntima de que el Sáhara occidental es marroquí", Marruecos ha aceptado irrevocablemente la vía del referéndum, pero no puede aceptar en modo alguno negociaciones directas con el Polisario, a lo cual sólo se le exhorta, y agregaba "que Marruecos es un Estado soberano que trata con Estados soberanos que no pueden obligarle a sentarse a esa mesa de negociaciones".

Pocos días antes, su consejero Ahme Reda Guedira había dicho que admitir la negociación directa con el Polisario sería conferirle una representatividad que, "en cualquier caso, sólo podría ser el resultado del referéndum". A este respecto, Marruecos cree que su posición se ha visto sensiblemente confortada por la reciente declaración dada a conocer por la agencia Efe con motivo de la visita a Madrid, la semana pasada, del responsable polisario Bechir Mustafá, según la cual, y tal como la comentaba ayer la totalidad de la Prensa marroquí, "España no reconoce al Polisario como representante único y legítimo, aunque entiende que es un factor a tener en cuenta".

Dudoso éxito

Dadas las posturas enfrentadas a este respecto de Marruecos y Argelia, parece muy difícil que la misión que llevan a cabo los emisarios del presidente en ejercicio de la OUA tenga algún éxito.El nuevo Gobierno marroquí, que ya se hace esperar demasiado y que incluirá a dos socialistas, parece, al menos en opinión de estos últimos, responder a la "necesidad de un frente interior unido ante los difíciles días que se aproximan".

El mensaje dirigido por Abderrahim Buabid, secretario general de la USFP (socialista), a la comisión nacional de su partido hace dos semanas, cuando discutieron la posibilidad de aceptar el llamado del rey a integrarse al Gobierno, se refería claramente "a la grave coyuntura tanto interna como externa, a los peligros que amenazan", y admitía incluso la posibilidad de que Marruecos tuviese que retirarse en un futuro inmediato de la OUA.