Tres millones de españoles han sufrido la gripe durante este año

Casi tres millones de españoles han pasado la gripe en lo que va de año. Desde el pasado 1 de enero hasta el 3 de septiembre de este año se habían registrado 2.806.567 casos de gripe, lo que quiere decir que el número de casos de gripe ha aumentado en España este año en un 300% con relación a la misma fecha de 1982, según los últimos datos estadísticos publicados en la revista especializada Tribuna Médica. En el mismo período del año pasado se declararon solamente 864.744 casos de gripe. Este aumento de la gripe en España contrasta con la regresión que está experimentando en Europa y en el mun...

Casi tres millones de españoles han pasado la gripe en lo que va de año. Desde el pasado 1 de enero hasta el 3 de septiembre de este año se habían registrado 2.806.567 casos de gripe, lo que quiere decir que el número de casos de gripe ha aumentado en España este año en un 300% con relación a la misma fecha de 1982, según los últimos datos estadísticos publicados en la revista especializada Tribuna Médica. En el mismo período del año pasado se declararon solamente 864.744 casos de gripe. Este aumento de la gripe en España contrasta con la regresión que está experimentando en Europa y en el mundo. Fuentes médicas aseguran que a mediados de este mes la gripe alcanzará uno de sus puntos más altos.

Este año no se espera, sin embargo, una incidencia epidemiológica importante, puesto que los tipos de virus cuya aparición se prevé son muy similares a los de la campaña anterior. Por esta causa, gran parte de la población está parcial o totalmente inmunizada frente a estos agentes infecciosos. Pero no hay que olvidar que la gripe aporta un riesgo añadido para los mayores de 45 años y para los llamados grupos de riesgo (aquellas personas con insuficiencias respiratorias, inmunodeprimidos, cardiacos, diabéticos y ancianos), para quienes se aconseja la vacuna.La gripe es una enfermedad respiratoria aguda, de origen viral, que provoca pandemias (incidencia a nivel mundial) y epidemias (incidencia local). A pesar de que en la mayoría de los casos tiene un carácter benigno, su aparición incrementa notablemente los índices de morbilidad y mortalidad. Se trata, en síntesis, de una infección del epitelio respiratorio que se transmite de individuo a individuo mediante la inhalación de gotitas infectantes de saliva expulsadas con la tos o bien por contacto salivar directo.

La incubación dura de 18 a 36 horas, aunque a veces puede prolongarse hasta. los tres días. Al cabo de este tiempo aparecen los primeros síntomas: malestar general, tos, escalofríos, dolores de cabeza, dolores musculares en las piernas o espalda, articulares... También la fiebre suele acompañar a toda esta sintomatología. El período agudo de la enfermedad dura de tres a cuatro días, si bien la astenia y la debilidad persisten, por regla general, una semana más.

Este año, gracias a las labores de control y seguimiento de la enfermedad realizados por los 101 centros que la Organiza,ción Mundial de la Salud (OMS) tiene repartidos por todo el mundo, se espera la llegada de tres tipos diferentes de virus (A/Filipinas/ 2/82; A/Brasil/1 1/78 y B/Singapur/222/79). Entre ellos hay un nuevo subtipo, pero no se cree que esto vaya a provocar una epidemia importante, ya que la variación antigénica respecto al año pasado es, mínima.

Pese a ello, la OMS recomienda la vacunación de todos aquellos grupos considerados de altos riesgo. Concretamente, los enfermos bronquíticos, renales, cardiacos y diabéticos; las embarazadas, puesto que la gripe triplica al parecer los casos de aborto; los lactantes, niños en edad preescolar y escolar, minusválidos, mayores de 60 años, personal hospitalario y de servicio públicos (bomberos, policía, militares, funcionarios, etcétera).

Varios tipos de vacunas

Existen actualmente dos tipos de vacunas: la de virus atenuados y la de virus inactivados que, a su vez, pueden ser virus enteros o fraccionados. Un tercer tipo de vacuna se investiga en estos momentos (véase EL PAIS de 20 de septiembre de 1983). Pertenece al tipo de virus atenuados, pero con la particularidad de que estos se obtienen directamente de las aves infectadas con gripe. Esto se debe al descubrimiento de: que estos animales contienen todas las variedades virales infectantes para el hombre, pues es en ellos donde se producen las mutaciones periódicas del material genético de los mismos y, en consecuencia, de: los antígenos de superficie.

Pese a las recomendaciones de la OMS, en España no existe una política clara de vacunación por parte de las autoridades sanitarias, aunque el coste de la vacuna sí está cubierto por la Seguridad Social. Ni siquiera en los centros geriátricos se da una definición clara ante la vacunación, aún cuando está demostrado que, aparte de los enfermos crónicos, son las personas mayores las que más peligros corren en casos de contraer la enfermedad.

Mientras que en otros países de Europa se vacuna, por término medio, el 10% de la población, en España no se supera el 3%. Sin embargo, el número de casos declarados se aproxima a los dos millones, con un coste social en torno a los 10.000 millones de pesetas anuales. El absentismo laboral también es elevado, sobre el 5%; mientras que el número de víctimas mortales atribuibles directa o indirectamente a esta enfermedad se cifra anualmente en unas 3.000. No obstante, según los epidemiólogos, estos datos estadísticos deberían incrementarse al menos en un 25%, correspondiente a los casos no declarados ni contabilizados oficialmente.

Las autoridades sanitarias españolas fijan como fecha tope de vacunación a mediados del presente mes, época en que se supone que hará su aparición el virus. La inmunidad que la vacuna proporciona tiene una duración de seis meses, que corresponde al período en que los virus gripales afectan a cada hemisferio terrestre.