El mosaico de las organizaciones terroristas vascas

La descomposición orgánica de ETA Político-militar ha incrementado con nuevas siglas el largo muestrario de organizaciones terroristas vascas y confundido aún más a una opinión pública, que da síntomas de haber renunciado ya a comprender las características y objetivos de estos grupos. Con excepción de ETApm VII Asamblea, cuyos miembros, los séptimos, se autodisolvieron en febrero de 1982, convencidos de que la lucha armada dificulta el autogobierno del País Vasco y alimenta a los sectores políticos más reaccionarios, el protagonismo de la violencia terrorista corresponde en la realidad...

La descomposición orgánica de ETA Político-militar ha incrementado con nuevas siglas el largo muestrario de organizaciones terroristas vascas y confundido aún más a una opinión pública, que da síntomas de haber renunciado ya a comprender las características y objetivos de estos grupos. Con excepción de ETApm VII Asamblea, cuyos miembros, los séptimos, se autodisolvieron en febrero de 1982, convencidos de que la lucha armada dificulta el autogobierno del País Vasco y alimenta a los sectores políticos más reaccionarios, el protagonismo de la violencia terrorista corresponde en la realidad a las siguientes organizaciones: ETA Militar, ETA Político-militar VIII Asamblea, ETA Político-militar línea KAS, Comandos Autónomos Anticapitalistas, Camandos Irautza, Comando Irrintzi y Grupos de Apoyo a ETA Militar. Existen asimismo pequéños colectivos que utilizan muy esporádicamente la violencia y que cuando firman sus acciones lo hacen con expresiones genéricas como "grupos de autodefensa".Salvo ETA Militar, que dispone de un potente aparato organizativo, el resto de las facciones carece de cobertura política y, en general, el número de sus miembros activos no sobrepasa la docena. Políticamente, la totalidad de estas organizaciones se sitúa en el campo de la izquierda abertzale (nacionalista vasca), aunque su ideología y las características de sus acciones varíen según estén influenciadas por las diferentes concepciones asignadas históricarrxente en ETA al papel de la lucha armada, las corrientes asambleárias y de autoorganización obrera o los movimientos alternativos radicales. No existe conexión orgánica entre estos grupos, pese a que sus acciones contra objetivos comunes- que previamente han provocado el rechazo de sectores de la población vasca coincidan esporádicamente y den la impresión de que existe una coordinación entre ellos.

Mitificación

La mayoría de los actuales activistas ingresó en estas organizaciones en los años de efervescencia de lucha armada que siguieron a la muerte de Franco, coincidiendo con el ascenso político del nacionalismo y, especialmente, de la izquierda abertzale. La represión que la dictadura ejerció en el Páis Vasco obtuvo el efecto retardado de provocar la mitificación de ETA y el vasquismo. La tesis de que "sólo la violencia puede resolver los problemas.y oponerse a la violencia del Estado" ganó cuerpo en muchos jóvenes que, atraídos por el poder real de ETA en la sociedad vásca, creyeron que el franquismo no había muerto y que era preciso librar una segunda y definitiva batalla.

El resultado es el rosario de siglas de organizaciones terroristas y de grupos violentos, que utilizan como armas desde el cóctel molotov y la lata de gasolina hasta los lanzagranadas o los artefactos explosivos de mecanismos complejos.

ETA Militar surgió, en el año 1974, en, el momento en que "el frente militar de ETA" se independizó del resto de la organización, rechazando las tesis, asumidas más tarde por ETA Político-militar, que establecían que las acciones armadas debían supeditarse a las labores políticas. En la actualidad propugna la alterrativa táctica de KAS, programa en el que se incluye una larga lista,de reivindicaciones,como la retirada de Euskadi de las fuerzas de seguridad del Estado, la inclusión de Navarra y, por último, un estatuto de autononúa que reconcizca expresamente,el derecho de autodeterminación y que determine que las fuerzas del Ejército establecidas en Euskadi pasen a depender directamente de las autoridades Yascas. Fuentes próximas a ETA Militar sostienen que esta organización estaría dispuesta a una tregua en el caso de que se concediera este programa.

ETApm VIII Asamblea nació en febrero de 1982, después de que los séptimos y la mayoría de la anterior dirección abandonaran la organización y la lucha airmada. No poseen un programa reivindicativo concreto y han retirado su apoyo al Estatuto de Guernica. Tras la escisión, la mayoría de los presos polimilis se alinearon con la VIII Asamblea, pero hace ya meses, ante la inactividad que mostraba este grupo, enviaron a la dirección un ultimátum, indicando que buscarían soluciones individuales si en un plazo determinado la organización no daba muestras de operatividad. A principios de este año, los octavos sufrieron una nueva escisión, de la que surgió ETApm línea KAS, partidaria de integrarse en ETA Militar. Ambos sectores se disputan la exclusividad de las siglas Político-militar.

Los Comandos Autónomos Anticapitalistas (CC AA) nacen hace ocho años vinculados al sector de LAIA (Partido de los Trabajadores Patriotas Revolucionarios), que rechazó la alternativa KAS. Sus comandos son, efectivamente, autónomos y se definen como asamblearios, anticapitalistas, antipartidos y antisindicatos. Son los autores de las bombas colocadas en sedes de las centrales sindicales vascas y no aceptan estatutos de autonomía ni tregua posible.

Los Comandos Irautza (Revolución) no han explicado las características de su ideología y estrategia, pero sus acciones, muy esporádicas, se dirigen contra pequeñas empresas con conflictos laborales o contra personas a quienes atribuyen una conducta "antiobrera" o "antipopular". El Comando Irrintzi, inactivo en ¡os últimos años, ha hecho de la ecología terreno preferido de lucha, incendiando pinares -con el argumento de que esos árboles deseítizan el terreno- y oponiéndose violentamente a proyectos que, en su opinión, constituyen un atentado contra el equilibrio de la naturaleza.