El Banco de España considera estancada la economía y aconseja acentuar los ajustes

La ecomía española registrará este año una tasa de crecimiento red sólo ligeramente superior a la obtenida en 1982, del 1,2%, según los informes presentados ayer al consejo general del Banco de España, que contabilizo el año pasado 130.985 millones de beneficios,cifra superior a los 124.459 del ejercicio anterior. Para afrontar de cara al futuro el estancamiento, que a corto plazo no permitiría crecer el 2% previsto por el Gobierno, el gobernador del banco emisor, José Ramón Álvarez Rendueles, recomendó acelerar y acentuar la correción de los desequilibrios básicos (precios, paro, déficit exte...

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La ecomía española registrará este año una tasa de crecimiento red sólo ligeramente superior a la obtenida en 1982, del 1,2%, según los informes presentados ayer al consejo general del Banco de España, que contabilizo el año pasado 130.985 millones de beneficios,cifra superior a los 124.459 del ejercicio anterior. Para afrontar de cara al futuro el estancamiento, que a corto plazo no permitiría crecer el 2% previsto por el Gobierno, el gobernador del banco emisor, José Ramón Álvarez Rendueles, recomendó acelerar y acentuar la correción de los desequilibrios básicos (precios, paro, déficit exterior y público), sin fiar el empeño a la política monetaria al olvidarse de ella.

Tanto el extenso discurso del Gobernador como el Informe anual 1982 de la entidad resaltan que el ritmo de ajuste de los desequilibrios está siendo en España nulo o más pausado, según los casos, que el de otros países, cuya intensificación de políticas agrandó las diferencias con nuestro país y ha complicado los problemas. Si bien las soluciones propugnadas coinciden en líneas generales con las del Gabinete, parten de un mayor pesimismo sobre los estímulos del exterior (aumento de las exportaciones) y son más tajantes al descartar un proceso de expansión autónoma basado en la demanda interna (consumo e inversión), por el peligro de aunientar los desequilibrios.Desde el principio de año, el Banco de España había previsto un crecimiento real del 3% en las exportaciones españolas, mientras el Gobierno fijó como objetivo el 5%, que aportaría más de la mitad del 2% de aumento de la producción de bienes y servicios y que ha sido sometido a dosis de optimismo o pesimismo, según los datos mensuales de Aduanas. Sin citar este hecho, el gobernador hizo una advertencia: "Conviene no perderse en los movimientos de las cifras y los indicadores de cada día y ver la situación con una mayor pespectiva. Y, con este enfoque, cabe decir que la economía, española sólo se reactivará en la medida en que se reanimen el conjunto de las economías industriales y sólo podrá participar de un proceso de expansión continuada en la medida en que haya conseguido reducir considerablemente sus desequilibrios".

Reducir la inflación

No obstante, Álvarez Rendueles aconsejó las políticas básicas de lo que, como recordó, se ha llamado "el ajuste positivo", y pidió acelerarlo, aunque ello sea más dificil en un clima de no expansión. "Necesitamos" dijo, "reducir la tasa de inflación a un ritmo más rápido que en el pasado reciente; y esto sólo puede conseguírse mediante una moderación efectiva de las rentas monetarias. Necesitamos reducir el paro, especialmente el juvenil; y ello aconseja flexibilizar los sistemas de contratación laboral".Citó luego la necesidad de liberar recursos "reales y financieros" mediante una reestructuración industrial como la estudiada ahora, contener y reducir el déficit público compendiendo que se requieren reformas de instituciones y de situaciones y mecanismos que engrosan las transferencias y subvenciones públicas" y hacer más rentable la economía para reanudar el crecimiento y el empleo.

El gobernador dio por resuelta la crisis bancaria, al menos en los casos más deitacados, y anunció un sistema de inspecciones periódicas. Su discurso terminó con una defensa de la autonomía del Banco de España.

En la memoria de actividades en 1982 de la entidad, figura el balance sectorializado, con 4,6 billones de pesetas de fondos en origen y destino. Además de confirmar que los benecios-de 1981 anunciados el año pasado fueron recortados luego en 20.000 millones, la cuenta de resultados específica que los 130.985 millones de pesetas de ganancias fueron cobsecuencia de aumentos del 52% en los ingresos y del 105% en los gastos. En los ingresos, 359.319 millones, casi la mitad procedieron de operaciones en divisas, algo menos por intereses de operaciones exteriores, y 87.758 millones por intereses interiores y cartera de valores.

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