Los contrabandistas advierten que de seguir las presiones policiales dejarán de invertir su dinero en empresas legales

"Los contrabandistas son gente honrada", afirma, con una amplia sonrisa, una de las personas más vinculadas al comercio ilegal en la ría de Arosa, quien bajo ningún concepto, y por razones obvias, autoriza la mención de su nombre. Es bastante joven, vive en el corazón de la zona afectada por el contrabando y trabaja intensamente en asuntos relacionados con este tráfico. Prácticamente no para desde hace ocho años. Mientras se producía esta conversación con EL PAÍS, las autoridades portuguesas; apresaban un nuevo alijo de tabaco en sus aguas jurisdiccionales a una embarcación con falsa matrícula...

"Los contrabandistas son gente honrada", afirma, con una amplia sonrisa, una de las personas más vinculadas al comercio ilegal en la ría de Arosa, quien bajo ningún concepto, y por razones obvias, autoriza la mención de su nombre. Es bastante joven, vive en el corazón de la zona afectada por el contrabando y trabaja intensamente en asuntos relacionados con este tráfico. Prácticamente no para desde hace ocho años. Mientras se producía esta conversación con EL PAÍS, las autoridades portuguesas; apresaban un nuevo alijo de tabaco en sus aguas jurisdiccionales a una embarcación con falsa matrícula española.

ENVIADO ESPECIALEste hombre considera desproporcionado el ruido organizado en torno al tema por "los socialistas", a quienes señala directamente como responsables de la polvareda. Y añade más severo: "Ya veremos qué va a pasar cuando los contrabandistas dejen de invertir su dinero en empresas legales". Si hay inspecciones de Hacienda u otras medidas de presión -es el punto de vista de la fuente mencionada- puede que algunas personas de las Rías Bajas tengan problemas, sean sometidas a sumarios judiciales o se vean obligadas a afrontar sanciones, pero quizá su dinero tenga que irse entonces a otra parte. Sin descartar otros países, por supuesto. Esta es la crudeza del planteamiento con que abordan el tema gentes relacionadas con los círculos mafiosos.

Para estos últimos, el delito que se comete no es tan grave, "habida cuenta de que no se trata de drogas, ojo: es simplemente tabaco, en un 90%, y whisky en un 10%. Es más, hasta hace unos meses ni siquiera se consideraba esto como un delito, sino como meras faltas administrativas".

Los grandes contrabandistas de otras épocas, los que metían el barco "hasta tierra", ya se han marchado de las Rías Bajas, siempre según esta fuente. Pero hay otros muchos que no piensan irse. Hace unos días se reunieron "los más importantes", pero fue simplemente para "regular precios". Ninguno de los participantes en esta reunión hablaron de parar la actividad comercial, afirma uno de los asistentes a la firma. De hecho, el trabajo continúa, aunque con un ritmo algo más irregular.

Los medios próximos a la dirección del contrabando niegan que las partidas de tabaco se utilicen ahora para pasar droga. Admiten, en efecto, que existe algún comercio de droga, pero en absoluto vinculado a quienes llevan el del tabaco. Ni que decir tiene que atribuyen a la falta de trabajo y a las inversiones de los contrabandistas en empresas legales la aceptación social del negocio del contrabando, puesto que ha permitido mejorar la economía de la zona.

Nuevo apresamiento

La mayor vigilancia de las autoridades no ha puesto fin, por el momento, al contrabando en esta zona. Tanto los servicios fiscales como los propios medios contrabandistas confirman la continuidad de los desembarcos nocturnos, con algunas adaptaciones a la nueva situación creada. Por ejemplo, los grandes camiones utilizados hasta hace unas semanas para distribuir el tabaco a distintos puntos de España han sido sustituidos por furgonetas y coches, en un intento de disminuir el riesgo de una aprehensión. Ayer mismo fue capturada una lancha de tipo medio, a la altura de Oporto, por las autoridades portuguesas, que encontraron un alijo de tabaco de unas 500 cajas, según las primeras informaciones.La embarcación llevaba matrícula española, concretamente de Villagarcía de Arosa, y era falsa, según pudo comprobarse rápidamente en un contacto con las autoridades españolas. Según estas últimas, la citada matrícula corresponde a un pesquero de Villagarcía, sin vinculaciones con el comercio ilegal. La lancha llevaba tripulantes de varias nacionalidades, entre ellos algún español. Esta noticia coincide con otras del fin de semana pasado, en el sentido de que un barco nodriza de las mafias del tabaco estaba situado en aguas portuguesas para "abastecer" a embarcaciones españolas, tratando de resguardarse un poco mejor de la vigilancia fiscal española.

Las matrículas de las embarcaciones y demás documentación exigida, por las autoridades de Marina aparece frecuentemente alterada en las capturas de barcos contrabandistas. La Comandancia de Marina de Vigo difundió ayer unas normas, oficialmente presentadas como Un intento de evitar accidentes marítimos en la época estival. En ellas se dice, entre otras cosas, que "todas las embarcaciones deportivas deberán llevar, pintado en sus amuras, el folio de su inscripción, y "deberán ir siempre tripuladas por personal titulado". Probablemente la inspección de este tipo de barcos comenzará en breve plazo.

Implicaciones en El Grove

A su vez, la localidad de El Grove, situada en la desembocadura de la ría de Arosa, registró el pasado fin de semana una notable actividad de la Guardia Civil, que inspeccionó varias propiedades de particulares y se interesó por datos relacionados con numerosas personas. Existen diligencias previas, de carácter judicial, contra varios vecinos de la citada zona. Cabe recordar que en ella se produjo el arresto de la dotación completa del cuartel de la Guardia Civil, y su inmediata sustitución por nuevos miembros del Cuerpo. Al parecer, las actuales gestiones se producen como consecuencia de la investigación abierta por el servicio de información de la Guardia Civil.También ayer, el abogado que representa a los tripulantes de los mercantes panameños apresados a finales de mayo, fuera de las aguas jurisdiccionales españolas, pidió en el juzgado la reforma del auto de procesamiento dictado contra los mismos.