Brusca caída en las exportaciones del sector pizarrero de Orense

El sector pizarrero de la provincia de Orense -el más importante de España- está atravesando una de las peores crisis de su historia, como consecuencia de la brusca, caída de las exportaciones. Francia, que absorbía el 80% de la producción, y otros países europeos como Alemania, Bélgica y, en menor medida, el Reino Unido, que compraban otro 10% de la pizarra orensana, han recortado sensiblemente sus importaciones de este producto. La crisis de la construcción también ha provocado una alarmante falta de demanda interior, lo que ha obligado a las empresas a reducir drásticamente su producción.La...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El sector pizarrero de la provincia de Orense -el más importante de España- está atravesando una de las peores crisis de su historia, como consecuencia de la brusca, caída de las exportaciones. Francia, que absorbía el 80% de la producción, y otros países europeos como Alemania, Bélgica y, en menor medida, el Reino Unido, que compraban otro 10% de la pizarra orensana, han recortado sensiblemente sus importaciones de este producto. La crisis de la construcción también ha provocado una alarmante falta de demanda interior, lo que ha obligado a las empresas a reducir drásticamente su producción.La actividad pizarrera es una de las más importantes para la economía orensana. Arraigada en la comarca de Valdeorras, ha contribuido en los últimos años a elevar la renta per cápita valdeorresa muy por encima de la media provincial. Actualmente funcionan en la zona 500 empresas y 350 establecimientos industriales, cuya aportación al total de la renta generada en la provincia es la mayor de entre todos los municipios orensanos, excepto la de la capital. Con un total de 62 canteras en explotación activa, el sector pizarrero emplea a más de 2.000 personas. Sus reservas se cifran en más de 18 millones de toneladas, de las que en 1982 se extrajeron 114.000, destinadas en un 90%. a la exportación, con un volumen de ventas superior a los 3.200 millones de pesetas.

A la falta de demanda se suma un factor determinante de la crisis de la pizarra como es el elevado coste de las explotaciones, que en algunas empresas han tratado de paliar con el empleo de mano de obra clandestina, especialmente portugueses residentes ilegalmente en España.

Archivado En