Luego, después ...
Le dirijo estas líneas para protestar por los muchos errores gramaticales que nos obligan a escuchar todos los medios de comunicación oral. Un ejemplo: el domingo día 27 de los corrientes, un locutor que presenta Don Domingo en Radio 1 (Radio Nacional de España), precisamente a las 11.15 horas, nos obsequió con la siguiente frase:"Voy a participar de que..., etcétera". El mal uso de esta preposición se ha generalizado, tanto en la radio como en la televisión. Igual da que quien se coloca ante el micrófono, o ante la cámara, sea un obrero, un político, un médico o incluso u...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
Le dirijo estas líneas para protestar por los muchos errores gramaticales que nos obligan a escuchar todos los medios de comunicación oral. Un ejemplo: el domingo día 27 de los corrientes, un locutor que presenta Don Domingo en Radio 1 (Radio Nacional de España), precisamente a las 11.15 horas, nos obsequió con la siguiente frase:"Voy a participar de que..., etcétera". El mal uso de esta preposición se ha generalizado, tanto en la radio como en la televisión. Igual da que quien se coloca ante el micrófono, o ante la cámara, sea un obrero, un político, un médico o incluso un catedrático, etcétera. El fatídico de siguiendo a "Yo creo..." o "A mí me parece..." es el pan de todos los días. Y pienso que, a fuerza de oírlo, todos terminaremos hablando mal. A mí -que no soy universitaria, aunque sí bachiller- me hieren estos disparates orales, tal vez porque nací en Salamanca, que, con Valladolid, tengo entendido es la provincia española en que mejor se habla el castellano (o se hablaba).
Y también podría hablar de los "más mayor" que dice muy frecuentemente ante las cámaras María Luisa Seco (y otros muchos presentadores e invitados). O el "luego, después" que se les escapa a gran parte de los que se dirigen a los radioyentes o telespectadores... E igualmente se dice en esos medios muy a menudo "pasar desapercibido" por "pasar inadvertido" -que son dos conceptos completamentes distintos-, así como "han habido" por "ha habido", etcétera. /