Washington minimiza el efecto de la decisión china de romper las relaciones culturales

El Gobierno norteamericano trató ayer de minimizar el impacto que sobre sus relaciones con China puede tener la decisión de Pekín de suspender sus relaciones culturales con Washington como medida de represalia contra la decisión adoptada por Washington el lunes pasado de conceder asilo político en Estados Unidos a la joven jugadora de tenis china Hu Na.

"Lamentamos esta decisión, que nos parece fuera de lugar, e insistimos en que los problemas entre China y Estados Unidos deben considerarse dentro del espectro más amplio de nuestras relaciones", afirmó John Hughes, portavoz del Depa...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El Gobierno norteamericano trató ayer de minimizar el impacto que sobre sus relaciones con China puede tener la decisión de Pekín de suspender sus relaciones culturales con Washington como medida de represalia contra la decisión adoptada por Washington el lunes pasado de conceder asilo político en Estados Unidos a la joven jugadora de tenis china Hu Na.

"Lamentamos esta decisión, que nos parece fuera de lugar, e insistimos en que los problemas entre China y Estados Unidos deben considerarse dentro del espectro más amplio de nuestras relaciones", afirmó John Hughes, portavoz del Departamento de Estado. Hughes expresó la confianza de su Gobierno de que "el caso Hu Na no afecte a los lazos entre Pekín y la Casa Blanca", si bien precisó que es "prematuro decir lo que pasará".

Hu Na, de 19 años, había pedido asilo político en el curso de un viaje a Estados Unidos en julio pasado, y obtuvo el lunes pasado asilo político tras nueve meses de debates en el seno del Gobierno norteamericano.

Este conflicto, que en Washington se ve como pasajero, viene a añadirse al de la venta de armas norteamericanas a Taiwan, que envenena las relaciones entre Estados Unidos y China desde la llegada del presidente Ronald Reagan a la Casa Blanca.

En este clima enrarecido, el embajador de la República Popular China en Estados Unidos, Zhang Wenjin, presentó ayer sus cartas credenciales al presidente Reagan.

Archivado En