La huelga se prolonga en Ecuador, pero no se secunda de manera unánime

El Frente Unitario de Trabajadores (FUT) de Ecuador y los sectores empresariales han decidido prolongar un día más la huelga general, cuya duración prevista era de 48 horas, y quizá amplien la convocatoria con carácter indefinido, hasta que el Gobierno dé una respuesta satisfactoria a sus reivindicaciones.La decisión de prolongar la huelga no ha sido seguida por todos los sectores. Así, las cámaras de comercio han optado por levantar la convocatoria y los establecimientos han abierto sus puertas al público. Sin embargo, los industriales y empresarios del sector agrario han manifestado su inten...

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El Frente Unitario de Trabajadores (FUT) de Ecuador y los sectores empresariales han decidido prolongar un día más la huelga general, cuya duración prevista era de 48 horas, y quizá amplien la convocatoria con carácter indefinido, hasta que el Gobierno dé una respuesta satisfactoria a sus reivindicaciones.La decisión de prolongar la huelga no ha sido seguida por todos los sectores. Así, las cámaras de comercio han optado por levantar la convocatoria y los establecimientos han abierto sus puertas al público. Sin embargo, los industriales y empresarios del sector agrario han manifestado su intención de continuar el paro.

Otro sector dividido es el del transporte, cuya confederación nacional ha levantado el paro, lo que ha permitido la reanudación del transporte interprovincial y del pesado. Sin embargo, la Federación de Chóferes, que controla principalmente el transporte público en las ciudades, ha decidido continuar la huelga.

Los funcionarios públicos han sido amenazados por el Gobierno con ser despedidos si no acudían a sus lugares de trabajo después del paro obligatorio dispuesto por el presidente de la República a fin de que no se sumaran a la huelga convocada por el FUT y el sector empresarial.

La impresión general es que el Gobierno sigue firme en sus posturas, pues en el diálogo mantenido con la FUT no ha cedido en ningún punto fundamental.

La actuación de la policía ha sido especialmente dura en algunas zonas. Se ha denunciado, con pruebas, que las mangueras utilizadas para disolver manifestaciones llevan mezclada en el agua una sustancia química que produce quemaduras de primer grado. La cifra de detenidos se eleva a 200 en todo el país, y hay que registrar un herido grave por disparos de bala, ayer, en Quito, además del muerto en Cuenca.

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